Omar Andres Ospina Hernandez
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martes, 28 de agosto de 2012
viernes, 28 de octubre de 2011
resumen del libro la BRUJA de Germán Castro Caycedo.
RESUMEN DEL LIBRO LA BRUJA DE GERMÁN CASTRO CAYCEDO.
CONTEXTO DEL AUTOR.
Germán Castro Caycedo quizás el autor colombiano más reconocido después de Gabriel García Márquez, Periodista y escritor nacido en zipaquirá el 3 de marzo de 1940, uno de los escritores más leídos en Hispanoamérica. Se caracteriza por su género de crónica periodística y el estilo de no ficción, sus obras son crónicas fruto de minuciosos trabajos de investigación y vivencias propias, en los lugares donde ocurrieron los hechos, Sus escritos han tocado los más diversos temas de la realidad colombiana: la violencia, el narcotráfico, la corrupción, la inmigración. En el desarrollo de su carrera como escritor ha publicado más de 18 libros, todos basados en historias de los lugares más recónditos de Colombia y aunque sus obras rayan con la ficción son trabajos muy bien documentados.
CONTEXTO DE LA OBRA.
El libro la “BRUJA” de Germán Castro Caycedo, es una crónica periodística , publicado en el año de 1994, Tal vez su obra más polémica, la cual se le obligo a retirar del mercado todos los ejemplares de su primera edición; después de intensos debates donde el autor tuvo que presentar toda la documentación, los juicios y nombres propios en que se basó su obra, pudo ser otra vez editada sin mayores correcciones,“ luego de la mayor persecución
sufrida por un libro colombiano en la segunda mitad del presente siglo en nuestro país , sale a la luz la quinta edición del libro la BRUJA.” (El autor)
RESUMEN
Aquel martes vi por última vez a monseñor. Debía ser enero. El obispo era un octogenario alto y delgado. Aun cuando se había retirado de la diócesis , Monseñor Alfonzo Uribe Jaramillo continuaba luchando contra Satanás: exorcizaba, sanaba , sacaba espíritus, liberaba, él había resuelto plantarse frente al “enemigo” orando ,conjurando el maleficio, pronunciando aquellos salmos que hacían encorvar a la gente y “ escupir gusanos, azotarse contra las paredes, destrozar con una fuerza sobre natural todo lo que alcanzaban. Es que, escúcheme: blasfeman con voces que no son las suyas y luego, ¡caray! Luego se quedan en silencio: con la boca reseca la respiración agitada. Con esa mirada calma que da la liberación… es que se quedan en un silencio que sobrecoge”, según sus propias palabras.
Amanda nació en Fredonia, un pueblo cafetero que por las mañanas se envuelve en la niebla porque esta encaramado en lo alto de la cordillera, al pie de Combia un cerro vertical y erguido como las murallas de llano grande.
Ella lo describe así:
Un pueblo bien alegre, con las calles empinadas, sin un solo centímetro plano. Es una escalera, pero una escalera llena de música. Y la plaza: la plaza está encima de la escalera, encima y en el centro, el marco y los alrededores estuvieron ocupados por las familias importantes es decir las más ricas y las más blancas. Las casas son sumamente antiguas. Cuando comenzó todo, allí habitaban las familias más ricas en los segundos pisos de estas mansiones, en
los primeros pisos hay locales comerciales con tiendas, almacenes, y algunos bares decentes que llamamos cantinas.
En la parte más alta de la plaza que es al occidente, construyeron la iglesia, la casa cural, el teatro municipal, otra casa ocupada por el directorio del partido conservador y el club social, todo sobre un atrio amplio y bien solido que va de esquina a esquina. El atrio era territorio exclusivo de los blancos.
En Fredonia era tan grande la distancia de las clases sociales que de niños nos enseñaron que no se saludaba a los negros ni se hablaba con los de abajo. Los de abajo podían ser los que venían del campo: les decíamos “montañeros”. O, también podían ser los que subían de la calle abajo o de corea, como le decían al barrio de aquellas. Cuando esos llegaban solo podían pisar el atrio cuando iban a misa.
Yo soy maestra. Estudie para maestra y me gusta mi profesión. Nunca quise nada diferente a ser maestra, aunque pase parte de mi vida metida en la brujería. Estudiaba para especializarme cada día más como maestra y estudiaba el arte de la brujería, y me gustaban las cosas de la gente, me gustaba relacionarme. Una tarde cuando estaba en el atrio escuche que hablaban de alguien especial que había llegado al pueblo “¿especial? ¿Qué tiene de especial? ¿Que qué tiene? ¡Dinero! el que llego es millonario y se llama Jaime Builes”.
Todo el mundo empezó a preguntar por Jaime Builes y a averiguar cómo era él: Jaime Builes era un hombre robusto, de menos de cuarenta, vivía vestido con camisas finas y pantalón brillante, zapatos de charol, unas veces vino tinto, otras negros. Era moreno, bajito, gordito, tenía un dientecito de oro y vivía riéndose. No se me va a olvidar que lo conocí en la heladería el paraíso. Lo conocí porque me dijeron, ¡ve: ese es el nuevo rico de Fredonia! A los pocos días lo vimos entrar con un porta folios al club, dicen que pago la cuenta de todos y los mando sacar, cuando hubo salido el ultimo cerró las
puertas y compro el club. Nos quedamos sin club. Días después hiso una gran fiesta con desfile y carrosas, con toda la gente del común del pueblo, mando traer de México una orquesta que le tocara el REY, y otras orquestas, la fiesta duro desde el anochecer de un viernes hasta un domingo por la mañana, después de semejante tracamanaso la vida en Fredonia no volvió a ser igual.
Después de esto Jaime Builes empezó a comprar todo cuanto podía en Fredonia y la región, compro tres de las cuatro esquinas de la plaza, cantinas heladerías, las casa de casi todos los ricos del pueblo, fincas, haciendas y todo lo que podía pero sin darse cuenta le estaba haciendo un mal muy grande al pueblo porque, por lo menos, duplico el precio de los arrendamientos y encareció en una forma barbará el de las tierras.
ALVARO VILLEGAS: la pasión de Jaime eran los gallos y los caballos, el hombre entraba a una gallera y se quedaba ocho o diez días con sus noches. En Fredonia me toco ver noches de ganarse, dos o tres fincas sobre el rio Cauca apostando a los gallos.
AMANDA: a Jaime Builes le gustaban la parranda, los caballos, las apuestas, las riñas de gallos, un día salió temprano para Medellín, y volvió por la tardecita en su automóvil, detrás del auto venia un camión con un caballo bellísimo que había comprado, detrás del camión, un bus con mariachis. Bajaron el caballo lo ensillaron y lo adornaron y Jaime se trepo en el (se llamaba el Dorado) el mariachi empezó a tocar un paso doble y el caballo empezó a bailar, y el jinete a reírse con su diente de oro al aire. Ese día les dio la media noche, Jaime montando y bebiendo, al mariachi tocando y al caballo bailando.
Yo vivía en esa época con Matilde Veloza, una amiga de la infancia, profesora como yo que a la vez estudiaba biología. Matilde estaba metida en los cuentos de los brebajes y yo en el de la brujería y como era estudiosa, aprovechaba cada lección para enseñarme las propiedades de algunas plantas y entonces nos dedicamos a hacer los hervidos. Ella me ayudaba con las recetas y las vendíamos. De eso vivíamos.
El cuento de Antonio Mesa es que él se enamoro de mi y cuando se dio cuenta que yo me mantenía metida en estas vainas, empezó a programar viajes para traerme regalos y conquistarme. El fue el primero que apareció con una cantidad de libros de brujería y yo me sentaba a estudiar los libros de brujería y, entonces ya aprendí con esos textos, aprovechando que este tipo me
mantenía al día, además de lo que aprendí de muchos otros brujos que visitaba para aprender de ellos.
ALVARO: el eterno problema de Jaime era que compraba una finca y paraba los oídos a lo que le dijera la gente y al primero que le dijera:” vea don Jaime, aquí lo que sirve es esto y esto” el no preguntaba, ni pensaba siquiera y así como se lo aconsejaban, cambiaba los potreros los cultivos y hasta el curso de las aguas. Esto hacia que ninguna de las haciendas de don Jaime fueran productivas, a duras penas y se podían sostener.
AMANDA: mientras tanto yo seguía con la brujería, y nunca conseguía nada, me mantenía sin un centavo, la plata no me al cansaba para nada me dedicaba a hacer pócimas , ataduras, rezos , a y también trabajaba con velas, sabes de quien lo aprendí,m a una bruja que se llamaba Amanda Londoño ,que también me la lleve para Fredonia ,y allá tuvo mucho éxito despertando la indignación del párroco que decía, si este pueblo sigue haciendo caso a ella y a cuanta bruja traen , a Fredonia les va a llegar un castigo divino. A pesar de aquello, seguí embarcada con el diablo, trabajando cirios y viendo, a pesar de los anuncios del párroco y de que éramos dizque una comunidad muy cristiana, medio pueblo estaba metido en estas cosas. A pesar de todo, mi único sueño era tener poder. Quería aprender cuanto más fuera posible.
ALVARO VILLEGAS: Jaime se enamoro de una niña que conoció en Fredonia en una obra de que presentaron en el teatro y que por cierto el mismo financio porque Amanda le pidió ese favor, ella se llamaba: Sola. vivía media cuadra debajo de la plaza por la calle de la barra, para conquistarla le llevaba mariachis, le regalaba joyas, ropa fina y hasta un carro le regalo, como estaban de moda en esa época los Renault 9 uno de esos le obsequio, envuelto en papel
celofán con un lazo de cinta bien ancho que lo rodeaba en cruz, el papá de Sola se llamaba Rudesindo y el Jaime se las ingenio para ganárselo a él también, algún tiempo duro el noviazgo entre regalos y excentricidades de Jaime hacia sola, hasta que decidieron casarse , no se imaginan lo que fue esa boda y sus preparativos, todo el mundo quería estar invitado y el que no invitaban se ingeniaba la forma de que fuera incluido en la lista, el vestido de Sola fue mandado a hacer en los Estados Unidos, y ella recibía clases de
etiqueta para saber cómo se debía portar, todo fue calculado y como todas las fiestas de Jaime esta duro varios días y vinieron mariachis y diferentes orquestas, el trago y la comida era abundante.
AMANDA: yo seguía brujeando con todas mis amigas profesoras, porque eso si, la que menos brujeaba, se mantenía haciendo entierros con los nombres de los hombres o sabia de brebajes; mi mamá ha hecho política toda la vida era la jefe del partido conservador en Fredonia, una vez trasladaron a mi hermano de un cargo que ocupaba en Fredonia para Andes, no sabíamos que hacer y yo me fui para donde el gobernador, él no me conocía pero yo me las ingenie para entrar allá. No querían atenderme pero yo dije: de hasta que no me atienda el gobernador no me voy de aquí, y así fue que me tuvo que atender y no solo logré que no trasladaran a mi hermano sino que le dieran un mejor cargo en Fredonia, de ahí en adelante empeso una gran amistad con el gobernador, hasta el punto que me llamaba para le hiciera trabajos de brujería y le fuera bien en los negocios.
ALVARO VILLEGAS: a don Jaime lo saco adelante una amante que él tuvo en Medellín, se llamaba Teodolinda, tenía una gran habilidad para comerciar y traían mercancía de contrabando y por ahí empezó todo el negocio, la señora era muy áspera y hasta peligrosa, el patrón siempre trataba de irla bien con ella parece como que le tenía miedo. Como terminan casi todos en este negocio a ella la mataron y le enviaron la cabeza a la mamá en una olla arrocera, a don Jaime le dio muy duro.
PONCHERA: míster Howard, era uno de los duros para los que trabajaba el patrón allá en el otro lado, él nos conto que todo esto de las drogas empezó
cuando la guerra en Vietnam, porque los soldados se tenían que drogar para resistir estar en ese infierno, cuando terminan la guerra que regresaron no pudieron terminar la adicción y empezó todo e cuento de los carteles. Antes de que aquí llegaran los gringos a traficar con yerba y después con cocaína, se vivía del marlboro. Había tres contrabandistas que lo metían por turbo, pero de un momento a otro entraron dos mas y ¿que paso? El mercado no aguanto tanto cigarrillo y se formo una guerra muy cruel que se llamo la guerra del marlboro. Ahí aparecieron por primera vez los sicarios y en esa guerra
mataron por primera vez a un sujeto desde una moto, porque todavía no se usaban las motos. ¿Y sabe quien manejaba esa moto de marca Lambretta? Pablo escobar que era un muchacho. Esa moto hizo historia en Medellín, porque esa fue la forma como empezó a trabajar Pablo. Era una Lambetta gris, con guarda barros rojos, y pablo la conservo siempre y decía: que cuando lo dejaran vivir en paz la iba a colocar en un jardín con un letrero que dijera “a ti te lo debo todo.”
El gringo Howard era zorro y jodido. Por ejemplo, el patrón no podía localizarlo nunca, ni nunca supimos donde vivía ni de donde salía, ni para donde iba, sino que el aparecía de golpe o llamaba de sorpresa para ver cómo iban las cosas o para pedir cuentas y, eso sí, a decir quien se iba a morir ese día o esa noche, por que cuando Howard se la cobraba a algún faltón, le explicaba al patrón por que lo había hecho. Y el patrón tenía que comer callado.
El negocio era muy grande con míster Howard de aquí para allá se llevaban la mercancía con mujeres que servían de mulas o en mercancía que se exportaban, para traer el dinero lo hacían camuflado en mercancía que entraba al país de contrabando. Siempre había que estar cambiando de estrategia para que no nos pillaran.
AMANDA: una vez el gobernador me llamo para decir me que el presidente de la republica me quería conocer por que él le había hablado muy bien de mi, y que tenía que irme de inmediato para donde ellos. Efectivamente conocí al presidente me pareció un señor muy serio , pero más tarde me di cuenta que
no era tan rígido como parecía , quería que le hiciera un trabajo para que le fuera bien en un negocio donde tenía comprometido mucho dinero, y como la brujería era lo mío me puse en esa tarea. Después me llamo muy emocionado a contarme que el negocio había resultado muy bien y que había ganado mucho dinero, ahí empezó otra amistad ya con el presidente de la republica. Un día me llamo el gobernador, que él y el presidente me necesitaban y yo me fui inmediatamente pera donde ellos, necesitaban un trabajo para que sus hijos se enamoraran y se casaran, yo les pedí todo lo necesario para empezar a trabajar y les dije todo lo que tenían que hacer, y efectivamente los muchachos
terminaron por casarse. Por medio del presidente conocí a muchas mujeres de generales que me buscaban para que le hiciera trabajos a sus maridos.
Entre todas las cosas que se me ocurrían y aprovechando la relación con el gobernador, se me ocurrió presentar al gobernador con don Jaime, un día que el gobernador visito Fredonia en una visita que yo misma organice, la fiesta que Jaime le hizo al gobernador fue como todas las de él porque eso sí, duro varios días con orquestas y todo lo que usted se imagine. Los encuentros con el gobernador y su equipo político fueron muchos hasta el punto que Jaime le financio la campaña política con la condición de que su esposa y su suegro tuvieran participación en las listas para el consejo, y Jaime manipulo todo para que pudieran ganar, empezando que los buses de flota Fredonia solo podían transportar a los que iban a votar por sus listas el día de las elecciones. Todos los empleados de las fincas tenían que votar por las listas del patrón, él se encargo de que todo eso saliera bien. Y en plena campaña yo me encargue de controlar el directorio conservador de la región para que no dañaran la situación es que en varias veces les dañe sus reuniones. Fueron muchas las visitas del gobernador a las fincas de Jaime para trabajar en la campaña.
ALVARO : las cosa no estaban marchando bien de algún tiempo para acá el dinero ya no llegaba como antes, se pasaban dos o tres meses sin llegar un centavo, y un día llego el patrón y ordeno despedir a todos los trabajadores de las fincas y dejar solo los estrictamente necesarios. Le estaba llendo mal en los negocios habían caído varios cargamentos y caletas y necesitaba pagar y
le toco empezar a pedir a los testaferros las propiedades para vender y pagar, por que el sabia que pagaba o lo mataban estaba muy asustado.
AMANDA: llego un tiempo donde empecé a sentirme muy mal, sentía que algo me aplastaba, duro durante varios meses, me mantenía angustiada con una zozobra que no se que era, el miedo era impresionante. Un día entre en una iglesia y había un montón de gente, cantaban, alzaban las manos y se movían y danzaban al son de unos cantos, sentí ganas de salir corriendo pero no podía, algo me amarraba a esa iglesia caliente que olía a pabilo y ser humano. Había algo que me amarraba al piso. Yo empecé a llorar y a llorar y no sabía por qué. En ese momento arrecio la angustia y resolvi entrar a la sacristía. Seguí hacia adentro y me encontré con una monja de la enseñanza con pelito corto, falda azul clara. Le decían hermana Alicia. Cuando me miro, la abrace y le dije! hermana por favor sálveme yo hago brujería¡(siempre me he preguntado por qué le dije eso. ¿Por qué hice eso? ¿Por qué se lo dije? Algo de mi Dios. La hermana Alicia. Una monja que exorcizaba porque diablos fui a dar allá.
LEONEL: Amanda estaba muy mal decía que la perseguían , vivía muy angustiada, yo estuve a punto de abandonarla por esta situación, pero cuando conoció a la hermana Amanda y empezamos con los grupos de oración , y con las liberaciones fue mejorando la cosa, aunque fue muy difícil, un proceso de años orando y visitando sacerdotes. Monseñor Alfonso Uribe Jaramillo obispo de Sonsón-Rionegro, nos ayudo mucho en este duro proceso de liberación.
HERMANA ALICIA: para hacer las liberaciones yo me cubría primero con la sangre de Cristo, y empezábamos con la oración orábamos por sanación interior , por perdón, y las jornadas eran muy intensas en ocasiones teníamos que suspender por qué Amanda ya no daba más, fueron necesarias muchas jornadas de oración , y varios exorcismos con sacerdotes para lograr la liberación; los espíritus eran muy fuertes y además también la estaban trabajando, fue un proceso muy largo y difícil.
PONCHERA: al patrón no le estaba saliendo nada bien, se le cayó un cargamento de por lo menos seis toneladas que iba para el otro, lado la vuelta se daño en México; los federales agarraron a los trabajadores los desnudaron ,
los amarraron con alambres, los torturaron como no se imagina y empezó a caer todo mundo.
LEONIDAS BUILES: de un momento a otro nos empezó a caer la ley, todos los días nos cogían un cargamento, o una o varias caletas, yo llame al tío Jaime y le dije que qué hacíamos, él me dijo que debíamos arreglar todo y sacar a nuestra gente del calabozo, estuvimos en comunicación por varios días hasta que me agarraron. Los federales me empezaron a torturar para que dijera dónde estaba el tío, pero yo decía que no sabía nada. Pero me obligaban a comunicarme con él para interceptar las llamadas y así fue como lo agarraron. Después que nos tenían nos llevaron a los calabozos y nos torturaron que para que dijéramos donde estaba el duro pero mi tío nunca dijo nada, le colocaban electricidad, lo golpeaban en los genitales, le arrancaron hasta las uñas y el nunca dijo nada, como nos colocaban bolsas en la cabeza para asfixiarnos en una de esas murió mi tío, la causa real de su muerte no se conoció porque no le hicieron autopsia, pero yo se que lo mataron allá.
ALVARO VILLEGAS: yo vi el cadáver de Jaime cuando regreso a Colombia. Estaba desfigurado en algunas partes. Lleno de moretones , las uñas de las manos y los pies habían desaparecido de algunos dedos, los testículos se veían horriblemente inflamados tenia vendada la cabeza porque la habían sacado el cerebro. Jaime fue sepultado en una tumba prestada. Y los asistentes fueron un puñado si se le compara con la afluencia de sus fiestas.
AMANDA: entre tantas liberaciones y exorcismos, que no eran del todo efectivos nos enteramos de un sacerdote de Alejandría que era muy bueno para este tipo de casos, y para allá nos fuimos, se llamaba el padre Guillermo Gil. El nos dijo que lo más importante era que yo estuviera dispuesta a perdonar y yo le dije que sí, y empezamos con la oración y luego con el exorcismo, yo no me acuerdo de nada, me contaron que era impresionante y muy difícil, pero el padre al final logro liberarme de todos los espíritus que me atormentaban.
Hoy del imperio de Jaime no queda ni un grano de tierra en poder de los descendientes, la flota Fredonia tiene otros dueños y el caballo que bailaba paso doble murió de infarto.
Omar Andrés Ospina Hernández.
CONTEXTO DEL AUTOR.
Germán Castro Caycedo quizás el autor colombiano más reconocido después de Gabriel García Márquez, Periodista y escritor nacido en zipaquirá el 3 de marzo de 1940, uno de los escritores más leídos en Hispanoamérica. Se caracteriza por su género de crónica periodística y el estilo de no ficción, sus obras son crónicas fruto de minuciosos trabajos de investigación y vivencias propias, en los lugares donde ocurrieron los hechos, Sus escritos han tocado los más diversos temas de la realidad colombiana: la violencia, el narcotráfico, la corrupción, la inmigración. En el desarrollo de su carrera como escritor ha publicado más de 18 libros, todos basados en historias de los lugares más recónditos de Colombia y aunque sus obras rayan con la ficción son trabajos muy bien documentados.
CONTEXTO DE LA OBRA.
El libro la “BRUJA” de Germán Castro Caycedo, es una crónica periodística , publicado en el año de 1994, Tal vez su obra más polémica, la cual se le obligo a retirar del mercado todos los ejemplares de su primera edición; después de intensos debates donde el autor tuvo que presentar toda la documentación, los juicios y nombres propios en que se basó su obra, pudo ser otra vez editada sin mayores correcciones,“ luego de la mayor persecución
sufrida por un libro colombiano en la segunda mitad del presente siglo en nuestro país , sale a la luz la quinta edición del libro la BRUJA.” (El autor)
RESUMEN
Aquel martes vi por última vez a monseñor. Debía ser enero. El obispo era un octogenario alto y delgado. Aun cuando se había retirado de la diócesis , Monseñor Alfonzo Uribe Jaramillo continuaba luchando contra Satanás: exorcizaba, sanaba , sacaba espíritus, liberaba, él había resuelto plantarse frente al “enemigo” orando ,conjurando el maleficio, pronunciando aquellos salmos que hacían encorvar a la gente y “ escupir gusanos, azotarse contra las paredes, destrozar con una fuerza sobre natural todo lo que alcanzaban. Es que, escúcheme: blasfeman con voces que no son las suyas y luego, ¡caray! Luego se quedan en silencio: con la boca reseca la respiración agitada. Con esa mirada calma que da la liberación… es que se quedan en un silencio que sobrecoge”, según sus propias palabras.
Amanda nació en Fredonia, un pueblo cafetero que por las mañanas se envuelve en la niebla porque esta encaramado en lo alto de la cordillera, al pie de Combia un cerro vertical y erguido como las murallas de llano grande.
Ella lo describe así:
Un pueblo bien alegre, con las calles empinadas, sin un solo centímetro plano. Es una escalera, pero una escalera llena de música. Y la plaza: la plaza está encima de la escalera, encima y en el centro, el marco y los alrededores estuvieron ocupados por las familias importantes es decir las más ricas y las más blancas. Las casas son sumamente antiguas. Cuando comenzó todo, allí habitaban las familias más ricas en los segundos pisos de estas mansiones, en
los primeros pisos hay locales comerciales con tiendas, almacenes, y algunos bares decentes que llamamos cantinas.
En la parte más alta de la plaza que es al occidente, construyeron la iglesia, la casa cural, el teatro municipal, otra casa ocupada por el directorio del partido conservador y el club social, todo sobre un atrio amplio y bien solido que va de esquina a esquina. El atrio era territorio exclusivo de los blancos.
En Fredonia era tan grande la distancia de las clases sociales que de niños nos enseñaron que no se saludaba a los negros ni se hablaba con los de abajo. Los de abajo podían ser los que venían del campo: les decíamos “montañeros”. O, también podían ser los que subían de la calle abajo o de corea, como le decían al barrio de aquellas. Cuando esos llegaban solo podían pisar el atrio cuando iban a misa.
Yo soy maestra. Estudie para maestra y me gusta mi profesión. Nunca quise nada diferente a ser maestra, aunque pase parte de mi vida metida en la brujería. Estudiaba para especializarme cada día más como maestra y estudiaba el arte de la brujería, y me gustaban las cosas de la gente, me gustaba relacionarme. Una tarde cuando estaba en el atrio escuche que hablaban de alguien especial que había llegado al pueblo “¿especial? ¿Qué tiene de especial? ¿Que qué tiene? ¡Dinero! el que llego es millonario y se llama Jaime Builes”.
Todo el mundo empezó a preguntar por Jaime Builes y a averiguar cómo era él: Jaime Builes era un hombre robusto, de menos de cuarenta, vivía vestido con camisas finas y pantalón brillante, zapatos de charol, unas veces vino tinto, otras negros. Era moreno, bajito, gordito, tenía un dientecito de oro y vivía riéndose. No se me va a olvidar que lo conocí en la heladería el paraíso. Lo conocí porque me dijeron, ¡ve: ese es el nuevo rico de Fredonia! A los pocos días lo vimos entrar con un porta folios al club, dicen que pago la cuenta de todos y los mando sacar, cuando hubo salido el ultimo cerró las
puertas y compro el club. Nos quedamos sin club. Días después hiso una gran fiesta con desfile y carrosas, con toda la gente del común del pueblo, mando traer de México una orquesta que le tocara el REY, y otras orquestas, la fiesta duro desde el anochecer de un viernes hasta un domingo por la mañana, después de semejante tracamanaso la vida en Fredonia no volvió a ser igual.
Después de esto Jaime Builes empezó a comprar todo cuanto podía en Fredonia y la región, compro tres de las cuatro esquinas de la plaza, cantinas heladerías, las casa de casi todos los ricos del pueblo, fincas, haciendas y todo lo que podía pero sin darse cuenta le estaba haciendo un mal muy grande al pueblo porque, por lo menos, duplico el precio de los arrendamientos y encareció en una forma barbará el de las tierras.
ALVARO VILLEGAS: la pasión de Jaime eran los gallos y los caballos, el hombre entraba a una gallera y se quedaba ocho o diez días con sus noches. En Fredonia me toco ver noches de ganarse, dos o tres fincas sobre el rio Cauca apostando a los gallos.
AMANDA: a Jaime Builes le gustaban la parranda, los caballos, las apuestas, las riñas de gallos, un día salió temprano para Medellín, y volvió por la tardecita en su automóvil, detrás del auto venia un camión con un caballo bellísimo que había comprado, detrás del camión, un bus con mariachis. Bajaron el caballo lo ensillaron y lo adornaron y Jaime se trepo en el (se llamaba el Dorado) el mariachi empezó a tocar un paso doble y el caballo empezó a bailar, y el jinete a reírse con su diente de oro al aire. Ese día les dio la media noche, Jaime montando y bebiendo, al mariachi tocando y al caballo bailando.
Yo vivía en esa época con Matilde Veloza, una amiga de la infancia, profesora como yo que a la vez estudiaba biología. Matilde estaba metida en los cuentos de los brebajes y yo en el de la brujería y como era estudiosa, aprovechaba cada lección para enseñarme las propiedades de algunas plantas y entonces nos dedicamos a hacer los hervidos. Ella me ayudaba con las recetas y las vendíamos. De eso vivíamos.
El cuento de Antonio Mesa es que él se enamoro de mi y cuando se dio cuenta que yo me mantenía metida en estas vainas, empezó a programar viajes para traerme regalos y conquistarme. El fue el primero que apareció con una cantidad de libros de brujería y yo me sentaba a estudiar los libros de brujería y, entonces ya aprendí con esos textos, aprovechando que este tipo me
mantenía al día, además de lo que aprendí de muchos otros brujos que visitaba para aprender de ellos.
ALVARO: el eterno problema de Jaime era que compraba una finca y paraba los oídos a lo que le dijera la gente y al primero que le dijera:” vea don Jaime, aquí lo que sirve es esto y esto” el no preguntaba, ni pensaba siquiera y así como se lo aconsejaban, cambiaba los potreros los cultivos y hasta el curso de las aguas. Esto hacia que ninguna de las haciendas de don Jaime fueran productivas, a duras penas y se podían sostener.
AMANDA: mientras tanto yo seguía con la brujería, y nunca conseguía nada, me mantenía sin un centavo, la plata no me al cansaba para nada me dedicaba a hacer pócimas , ataduras, rezos , a y también trabajaba con velas, sabes de quien lo aprendí,m a una bruja que se llamaba Amanda Londoño ,que también me la lleve para Fredonia ,y allá tuvo mucho éxito despertando la indignación del párroco que decía, si este pueblo sigue haciendo caso a ella y a cuanta bruja traen , a Fredonia les va a llegar un castigo divino. A pesar de aquello, seguí embarcada con el diablo, trabajando cirios y viendo, a pesar de los anuncios del párroco y de que éramos dizque una comunidad muy cristiana, medio pueblo estaba metido en estas cosas. A pesar de todo, mi único sueño era tener poder. Quería aprender cuanto más fuera posible.
ALVARO VILLEGAS: Jaime se enamoro de una niña que conoció en Fredonia en una obra de que presentaron en el teatro y que por cierto el mismo financio porque Amanda le pidió ese favor, ella se llamaba: Sola. vivía media cuadra debajo de la plaza por la calle de la barra, para conquistarla le llevaba mariachis, le regalaba joyas, ropa fina y hasta un carro le regalo, como estaban de moda en esa época los Renault 9 uno de esos le obsequio, envuelto en papel
celofán con un lazo de cinta bien ancho que lo rodeaba en cruz, el papá de Sola se llamaba Rudesindo y el Jaime se las ingenio para ganárselo a él también, algún tiempo duro el noviazgo entre regalos y excentricidades de Jaime hacia sola, hasta que decidieron casarse , no se imaginan lo que fue esa boda y sus preparativos, todo el mundo quería estar invitado y el que no invitaban se ingeniaba la forma de que fuera incluido en la lista, el vestido de Sola fue mandado a hacer en los Estados Unidos, y ella recibía clases de
etiqueta para saber cómo se debía portar, todo fue calculado y como todas las fiestas de Jaime esta duro varios días y vinieron mariachis y diferentes orquestas, el trago y la comida era abundante.
AMANDA: yo seguía brujeando con todas mis amigas profesoras, porque eso si, la que menos brujeaba, se mantenía haciendo entierros con los nombres de los hombres o sabia de brebajes; mi mamá ha hecho política toda la vida era la jefe del partido conservador en Fredonia, una vez trasladaron a mi hermano de un cargo que ocupaba en Fredonia para Andes, no sabíamos que hacer y yo me fui para donde el gobernador, él no me conocía pero yo me las ingenie para entrar allá. No querían atenderme pero yo dije: de hasta que no me atienda el gobernador no me voy de aquí, y así fue que me tuvo que atender y no solo logré que no trasladaran a mi hermano sino que le dieran un mejor cargo en Fredonia, de ahí en adelante empeso una gran amistad con el gobernador, hasta el punto que me llamaba para le hiciera trabajos de brujería y le fuera bien en los negocios.
ALVARO VILLEGAS: a don Jaime lo saco adelante una amante que él tuvo en Medellín, se llamaba Teodolinda, tenía una gran habilidad para comerciar y traían mercancía de contrabando y por ahí empezó todo el negocio, la señora era muy áspera y hasta peligrosa, el patrón siempre trataba de irla bien con ella parece como que le tenía miedo. Como terminan casi todos en este negocio a ella la mataron y le enviaron la cabeza a la mamá en una olla arrocera, a don Jaime le dio muy duro.
PONCHERA: míster Howard, era uno de los duros para los que trabajaba el patrón allá en el otro lado, él nos conto que todo esto de las drogas empezó
cuando la guerra en Vietnam, porque los soldados se tenían que drogar para resistir estar en ese infierno, cuando terminan la guerra que regresaron no pudieron terminar la adicción y empezó todo e cuento de los carteles. Antes de que aquí llegaran los gringos a traficar con yerba y después con cocaína, se vivía del marlboro. Había tres contrabandistas que lo metían por turbo, pero de un momento a otro entraron dos mas y ¿que paso? El mercado no aguanto tanto cigarrillo y se formo una guerra muy cruel que se llamo la guerra del marlboro. Ahí aparecieron por primera vez los sicarios y en esa guerra
mataron por primera vez a un sujeto desde una moto, porque todavía no se usaban las motos. ¿Y sabe quien manejaba esa moto de marca Lambretta? Pablo escobar que era un muchacho. Esa moto hizo historia en Medellín, porque esa fue la forma como empezó a trabajar Pablo. Era una Lambetta gris, con guarda barros rojos, y pablo la conservo siempre y decía: que cuando lo dejaran vivir en paz la iba a colocar en un jardín con un letrero que dijera “a ti te lo debo todo.”
El gringo Howard era zorro y jodido. Por ejemplo, el patrón no podía localizarlo nunca, ni nunca supimos donde vivía ni de donde salía, ni para donde iba, sino que el aparecía de golpe o llamaba de sorpresa para ver cómo iban las cosas o para pedir cuentas y, eso sí, a decir quien se iba a morir ese día o esa noche, por que cuando Howard se la cobraba a algún faltón, le explicaba al patrón por que lo había hecho. Y el patrón tenía que comer callado.
El negocio era muy grande con míster Howard de aquí para allá se llevaban la mercancía con mujeres que servían de mulas o en mercancía que se exportaban, para traer el dinero lo hacían camuflado en mercancía que entraba al país de contrabando. Siempre había que estar cambiando de estrategia para que no nos pillaran.
AMANDA: una vez el gobernador me llamo para decir me que el presidente de la republica me quería conocer por que él le había hablado muy bien de mi, y que tenía que irme de inmediato para donde ellos. Efectivamente conocí al presidente me pareció un señor muy serio , pero más tarde me di cuenta que
no era tan rígido como parecía , quería que le hiciera un trabajo para que le fuera bien en un negocio donde tenía comprometido mucho dinero, y como la brujería era lo mío me puse en esa tarea. Después me llamo muy emocionado a contarme que el negocio había resultado muy bien y que había ganado mucho dinero, ahí empezó otra amistad ya con el presidente de la republica. Un día me llamo el gobernador, que él y el presidente me necesitaban y yo me fui inmediatamente pera donde ellos, necesitaban un trabajo para que sus hijos se enamoraran y se casaran, yo les pedí todo lo necesario para empezar a trabajar y les dije todo lo que tenían que hacer, y efectivamente los muchachos
terminaron por casarse. Por medio del presidente conocí a muchas mujeres de generales que me buscaban para que le hiciera trabajos a sus maridos.
Entre todas las cosas que se me ocurrían y aprovechando la relación con el gobernador, se me ocurrió presentar al gobernador con don Jaime, un día que el gobernador visito Fredonia en una visita que yo misma organice, la fiesta que Jaime le hizo al gobernador fue como todas las de él porque eso sí, duro varios días con orquestas y todo lo que usted se imagine. Los encuentros con el gobernador y su equipo político fueron muchos hasta el punto que Jaime le financio la campaña política con la condición de que su esposa y su suegro tuvieran participación en las listas para el consejo, y Jaime manipulo todo para que pudieran ganar, empezando que los buses de flota Fredonia solo podían transportar a los que iban a votar por sus listas el día de las elecciones. Todos los empleados de las fincas tenían que votar por las listas del patrón, él se encargo de que todo eso saliera bien. Y en plena campaña yo me encargue de controlar el directorio conservador de la región para que no dañaran la situación es que en varias veces les dañe sus reuniones. Fueron muchas las visitas del gobernador a las fincas de Jaime para trabajar en la campaña.
ALVARO : las cosa no estaban marchando bien de algún tiempo para acá el dinero ya no llegaba como antes, se pasaban dos o tres meses sin llegar un centavo, y un día llego el patrón y ordeno despedir a todos los trabajadores de las fincas y dejar solo los estrictamente necesarios. Le estaba llendo mal en los negocios habían caído varios cargamentos y caletas y necesitaba pagar y
le toco empezar a pedir a los testaferros las propiedades para vender y pagar, por que el sabia que pagaba o lo mataban estaba muy asustado.
AMANDA: llego un tiempo donde empecé a sentirme muy mal, sentía que algo me aplastaba, duro durante varios meses, me mantenía angustiada con una zozobra que no se que era, el miedo era impresionante. Un día entre en una iglesia y había un montón de gente, cantaban, alzaban las manos y se movían y danzaban al son de unos cantos, sentí ganas de salir corriendo pero no podía, algo me amarraba a esa iglesia caliente que olía a pabilo y ser humano. Había algo que me amarraba al piso. Yo empecé a llorar y a llorar y no sabía por qué. En ese momento arrecio la angustia y resolvi entrar a la sacristía. Seguí hacia adentro y me encontré con una monja de la enseñanza con pelito corto, falda azul clara. Le decían hermana Alicia. Cuando me miro, la abrace y le dije! hermana por favor sálveme yo hago brujería¡(siempre me he preguntado por qué le dije eso. ¿Por qué hice eso? ¿Por qué se lo dije? Algo de mi Dios. La hermana Alicia. Una monja que exorcizaba porque diablos fui a dar allá.
LEONEL: Amanda estaba muy mal decía que la perseguían , vivía muy angustiada, yo estuve a punto de abandonarla por esta situación, pero cuando conoció a la hermana Amanda y empezamos con los grupos de oración , y con las liberaciones fue mejorando la cosa, aunque fue muy difícil, un proceso de años orando y visitando sacerdotes. Monseñor Alfonso Uribe Jaramillo obispo de Sonsón-Rionegro, nos ayudo mucho en este duro proceso de liberación.
HERMANA ALICIA: para hacer las liberaciones yo me cubría primero con la sangre de Cristo, y empezábamos con la oración orábamos por sanación interior , por perdón, y las jornadas eran muy intensas en ocasiones teníamos que suspender por qué Amanda ya no daba más, fueron necesarias muchas jornadas de oración , y varios exorcismos con sacerdotes para lograr la liberación; los espíritus eran muy fuertes y además también la estaban trabajando, fue un proceso muy largo y difícil.
PONCHERA: al patrón no le estaba saliendo nada bien, se le cayó un cargamento de por lo menos seis toneladas que iba para el otro, lado la vuelta se daño en México; los federales agarraron a los trabajadores los desnudaron ,
los amarraron con alambres, los torturaron como no se imagina y empezó a caer todo mundo.
LEONIDAS BUILES: de un momento a otro nos empezó a caer la ley, todos los días nos cogían un cargamento, o una o varias caletas, yo llame al tío Jaime y le dije que qué hacíamos, él me dijo que debíamos arreglar todo y sacar a nuestra gente del calabozo, estuvimos en comunicación por varios días hasta que me agarraron. Los federales me empezaron a torturar para que dijera dónde estaba el tío, pero yo decía que no sabía nada. Pero me obligaban a comunicarme con él para interceptar las llamadas y así fue como lo agarraron. Después que nos tenían nos llevaron a los calabozos y nos torturaron que para que dijéramos donde estaba el duro pero mi tío nunca dijo nada, le colocaban electricidad, lo golpeaban en los genitales, le arrancaron hasta las uñas y el nunca dijo nada, como nos colocaban bolsas en la cabeza para asfixiarnos en una de esas murió mi tío, la causa real de su muerte no se conoció porque no le hicieron autopsia, pero yo se que lo mataron allá.
ALVARO VILLEGAS: yo vi el cadáver de Jaime cuando regreso a Colombia. Estaba desfigurado en algunas partes. Lleno de moretones , las uñas de las manos y los pies habían desaparecido de algunos dedos, los testículos se veían horriblemente inflamados tenia vendada la cabeza porque la habían sacado el cerebro. Jaime fue sepultado en una tumba prestada. Y los asistentes fueron un puñado si se le compara con la afluencia de sus fiestas.
AMANDA: entre tantas liberaciones y exorcismos, que no eran del todo efectivos nos enteramos de un sacerdote de Alejandría que era muy bueno para este tipo de casos, y para allá nos fuimos, se llamaba el padre Guillermo Gil. El nos dijo que lo más importante era que yo estuviera dispuesta a perdonar y yo le dije que sí, y empezamos con la oración y luego con el exorcismo, yo no me acuerdo de nada, me contaron que era impresionante y muy difícil, pero el padre al final logro liberarme de todos los espíritus que me atormentaban.
Hoy del imperio de Jaime no queda ni un grano de tierra en poder de los descendientes, la flota Fredonia tiene otros dueños y el caballo que bailaba paso doble murió de infarto.
Omar Andrés Ospina Hernández.
los mandamientos de la iglesia y los de la ley de Dios
LOS MANDAMIENTOS DE LA SANTA MADRE IGLESIA.
Los mandamientos de la Iglesia se sitúan en la línea de una vida moral referida a la vida litúrgica y que se alimenta de ella. El carácter obligatorio de estas leyes positivas promulgadas por la autoridad eclesiástica tiene por fin garantizar a los fieles el mínimo indispensable en el espíritu de oración y en el esfuerzo moral, en el crecimiento del amor de Dios y del prójimo. Los mandamientos más generales de la Santa Madre Iglesia son cinco:
El primer mandamiento:
[oír misa entera los domingos y fiestas de precepto] exige a los fieles participar en la celebración eucarística, en la que se reúne la comunidad cristiana, el día en que conmemora la Resurrección del Señor, y en aquellas principales fiestas litúrgicas que conmemoran los misterios del Señor, la Virgen María y los santos.
El segundo mandamiento:
(Confesar los pecados mortales al menos una vez al año, y en peligro de muerte, y si se ha de comulgar) asegura la preparación para la Eucaristía mediante la recepción del sacramento de la Reconciliación, que continúa la obra de conversión y de perdón del Bautismo.
El tercer mandamiento:
(Comulgar por Pascua de Resurrección) garantiza un mínimo en la recepción del Cuerpo y la Sangre del Señor en relación con el tiempo de Pascua, origen y centro de la liturgia cristiana.
El cuarto mandamiento:
(Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Santa Madre Iglesia) asegura los tiempos de ascesis y de penitencia que nos preparan para las fiestas litúrgicas; contribuyen a hacernos adquirir el dominio sobre nuestros instintos y la libertad del corazón.
El quinto mandamiento:
(Ayudar a la Iglesia en sus necesidades) señala la obligación de ayudar, cada uno según su capacidad, a subvenir a las necesidades materiales de la Iglesia.
La santa madre iglesia nos da sus cinco mandamientos y frente a cada uno nos pide cumplir con unos compromisos, además también nos hace unas prohibiciones vamos a revisarlos uno a uno.
1. Celebrar misa todos los domingos y fiestas de precepto.
¿Que se nos pide la iglesia?
Participar activamente de la eucaristía.
Cuando no es posible cumplir el precepto el día ordenado hacerlo en la víspera del día anterior.
No realizar trajo servil.
Llegar temprano a la eucaristía y no salirse ant es de terminar.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Llegar tarde a la eucaristía.
Faltar a la eucaristía sin causa grave.
Trabajar.
Salir de la eucaristía sin haber terminado.
2. Confesar los pecados mortales al menos una vez al año y en peligro de muerte y si se ha de comulgar.
¿Que nos pide la iglesia?
Prepararse bien siguiendo los cinco pasos para una buena confesión con una actitud penitente.
Confesar los pecados mortales.
Prepararse espiritualmente para la comunión.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Comulgar en pecado grave.
Hacer una mala confesión de manera deliberada.
Permanecer en pecado mortal.
3. Comulgar por pascua de resurrección.
¿Que nos pide la iglesia?
Celebrar el misterio pascual.
Estar en gracia.
Participar de la eucaristía.
Comulgar no solo en pascua sino siempre que sea posible.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Permanecer por más de un año privado de la comunión.
La no celebración del misterio pascual de Cristo.
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS.
Éxodo 20, 2-17.
Yo soy Yahvé, tu Dios, que te he sacado del país de Egipto, del lugar de esclavitud
No tendrás otros dioses fuera de mí.
Note harás escultura ni imagen alguna
De lo que hay arriba en los cielos,
Abajo en la tierra o en las aguas debajo de la tierra.
No te postraras ante ellas ni les
Darás culto, porque Yo Yahvé, tu Dios,
Soy un Dios celoso, que castigo la iniquidad
De los padres en los hijos hasta la
Tercera y cuarta generación de los que
Me odian, pero tengo misericordia de
Mil generaciones con los que me aman y
Guardan mis mandamientos.
No pronunciaras el nombre de Yahvé,
Tu Dios, en falso; porque Yahvé no dejara sin castigo
A quien pronuncie su nombre en falso.
Recuerda el día del sábado para
Santificarlo. Seis días trabajaras y harás
Todos tus trabajos, pero el día séptimo
Es el día de descanso en honor de Yahvé, tu Dios.
No harás ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo,
Ni tu hija, tu siervo, ni tu sierva,
Ni tu ganado, ni el forastero que habita en tu ciudad.
Pues en seis días hizo Yahvé el cielo y la tierra,
El mar y todo cuanto contienen, y el séptimo descanso.
Por eso bendijo Yahvé el día sábado y lo santifico.
Honra a tu padre y a tu madre, para
Que se prolonguen tus días sobre la tierra
Que Yahvé, tu Dios, te va a dar.
No mataras.
No cometerás adulterio.
No robaras.
No darás testimonio falso contra tu prójimo.
No codiciaras la casa de tu prójimo,
Ni codiciaras la mujer de tu prójimo,
Ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno,
Ni nada que sea de tu prójimo.
PRIMER MANDAMIENTO:
AMAR A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS.
“Maestro, ¿qué he de hacer yo de bueno para conseguir la vida eterna?” Al joven que Le hace esta pregunta, Jesús responde primero invocando la necesidad de reconocer a Dios Como “el único Bueno”, como el Bien por excelencia y como la fuente de todo bien. Luego Jesús le declara: “Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos”. Y cita a su interlocutor los preceptos que se refieren al amor del prójimo: “No matarás, no cometerás Adulterio, no robarás, no levantarás testimonio falso, honra a tu padre y a tu madre”. Finalmente, Jesús resume estos mandamientos de una manera positiva: “Amarás a tu Prójimo como a ti mismo” (Mt 19, 16-19). (CEC.2052)
Es el más grande de todos los mandamientos ya nos lo dice Jesús “ amaras al señor tu Dios, con todo tu corazón , con toda tu alma y toda tu mente” .(Mt,22,37); “ al señor tu Dios adoraras y a él solo darás culto” (Mt,4,10); Cristo plenitud de la revelación con estas palabras reafirma el mandato dado desde el AT, “ únicamente preocupaos de guardar el mandato y la ley que os dio moisés, siervo de Yahvé: améis a Yahvé vuestro Dios , que sigáis siempre sus caminos, que guardéis sus mandamientos y os mantengáis unidos a él y le sirváis con todo vuestro corazón , y con toda vuestra alma.(Jos, 22,5);
Dios a través de Cada uno de los mandamientos nos invita a cumplir con una serie compromisos y a guardar unas prohibiciones frente a cada uno de los mandatos dados a la humanidad desde la antigua alianza por medio de moisés
Lo que nos prohíbe el primer mandamiento son las siguientes acciones o actitudes:
el rechazo a la autoridad eclesial.
Herejía.
Apostasía.
Cisma.
Idolatría.
Desesperación-presunción.
Odio a Dios.
Tibieza espiritual.
Tentar a Dios.
Politeísmo.
Indiferencia.
Panteísmo.
Ingratitud.
Incredulidad.
Sacrilegio.
Profanación.
Anti testimonio.
Profanación.
Como buenos cristianos debemos vigilar los compromisos que tenemos con cada uno de los mandamientos el primero nos pide:
Creer en Dios y dar testimonio de él.
Vigilar nuestra fe rechazando lo que se opone a ella.
Temor de ofender el amor de Dios y de provocar su castigo.
Evitar la desesperación o la presunción, confiar en Dios y esperar de él la salvación personal y el perdón de los pecados.
Adorarlo y reconocerlo como Dios creador y salvador.
Orar siempre sin desfallecer.
Hacer de nuestra vida un sacrificio de adoración y gratitud.
Practicar las virtudes teologales.
Fidelidad en las promesas hechas a Dios en manifestación de respeto por la majestad divina.
Practicar los consejos evangélicos.
Abrasas y practicar la verdad sobre todo en lo que se refiere a Dios.
Rendir a Dios un culto autentico.
Suscitar en las demás personas el amor por el bien y la verdad.
No obligar a nadie a actuar en contra de su conciencia.
Respetar el derecho a la libertad religiosa en las demás personas.
SEGUNDO MANDAMIENTO:
NO TOMARAS EN FALSO EL NOMBRE DEL SEÑOR TU DIOS.
Signo de nuestro respeto a Dios es no colocar su nombre como garantía de nuestra palabra “si decimos no hemos pecado, hacemos de él un mentiroso su palabra no está en nosotros” (1Jn.1, 10)
Varios pasajes de la sagrada escritura nos hacen referencia a este mandamiento. (Dt.5; St.5, 12; 2,7; Mt.5, 33-38; Nm.30, 3; Rm.2, 24.)
Respetar el nombre de nuestro Dios y no jurar por su nombre nos compromete con el cumplimiento de unos mandatos y prohibiciones derivados de este mandamiento.
ESTO ES LO QUE DIOS NOS PIDE EN ESTE MANDAMIENTO.
Respetar el nombre del señor y regular nuestra palabra en el uso de las cosas sagradas.
Dar testimonio del nombre del señor confesando su fe sin ceder al temor.
Usar el nombre del señor para bendecir, alabar y glorificar.
Aceptar la voluntad de Dios sin blasfemar contra él.
Fidelidad al nombre del señor.
Cumplir lo prometido en el nombre del señor.
No recurrir al nombre del señor por motivos fútiles.
Honrar la palabra.
EL RESPETO DEL NOMBRE DEL SEÑOR NOS PROHÍBE TAMBIÉN:
El uso de los apodos.
Irrespetar y usar mal el nombre del señor.
Abusar del nombre del señor poniéndolo de por medio en situaciones innecesarias.
El engaño y el ser mentirosos.
Blasfemar contra el nombre y la voluntad de Dios.
Faltar a las promesas hechas en el nombre del señor.
Recurrir al nombre del señor para justificar prácticas criminales.
El uso mágico del nombre divino.
Prohíbe el juramento en falso.
TERCER MANDAMIENTO:
SANTIFICAR EL DÍA DEL SEÑOR.
Dios que todo lo ha hecho perfecto nos pide santificar el domingo en acción de gracias y que lo glorifiquemos con nuestro descanso “recuerda el día del sábado para glorificarlo. Seis días trabajaras y harás todos tus trabajos, pero el día séptimo es el día de descanso para el señor, tú Dios. No harás ningún trabajo. (Ex.20, 8-10) otros textos bíblicos contienen este precepto y lo podemos encontrar en:
(Ex.20, 11; Gn.2, 3; Sal.118, 24; Hb.4, 4.10, 25.)
Como cristianos que somos debemos glorificar el nombre del señor y santificar el día séptimo por esto el tercer mandamiento nos pide:
Guardar el día séptimo que es el día del señor.
Ir a la celebración litúrgica dominical, dando culto a Dios.
Celebrar la resurrección del señor, centro y razón de nuestra fe cristiana.
Descansar y olvidarnos del trabajo, aprovechando para cultivar la vida familiar, cultural, social y religiosa, compartiendo con los hermanos en un ambiente de sano esparcimiento.
ESTE MANDAMIENTO TAMBIÉN NOS PROHÍBE:
Abstnernos de la celebración litúrgica dominical.
Realizar trabajos ambiciosos, o sin necesidad urgente.
Descuidar la vida familiar, social y religiosa por dedicarnos a la atención del trabajo.
Negar el culto a Dios.
CUARTO MANDAMIENTO:
HONRAR PADRE Y MADRE.
Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus días sobre la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar (Ex 20, 12).
Vivía sujeto a ellos (Lc 2, 51).
El Señor Jesús recordó también la fuerza de este “mandamiento de Dios” (Mc 7, 8 -13). El apóstol enseña: “Hijos, obedeced a vuestros padres en el Señor; porque esto es justo. “Honra a tu padre y a tu madre”, tal es el primer mandamiento que lleva consigo una promesa: “para que seas feliz y se prolongue tu vida sobre la tierra”“(Ef. 6,1-3; Cf. Dt 5 16).
Este mandamiento no se limita solo al respeto por los padres también se extiende a muchas otras cosas que nos pide:
Respeto y obediencia a los mayores (abuelos).
Honor respeto y defensa de la patria.
Que los entes gubernamentales protejan y defiendan la familia como fundamento de la sociedad.
Respeto y obediencia por los padres aun después de la mayoría de edad y corresponsabilidad con ellos.
Desde la familia dar la debida formación cristiana a los hijos.
Que la familia respete la libertad de los hijos para optar por una profesión en sus vidas.
El amor conyugal, fraterno, paternal y filial (amor en la familia).
El matrimonio como roca solida donde se debe fundamentar la familia.
El consejo dentro de la familia.
ESTE MANDAMIENTO NOS PROHÍBE:
El irrespeto por los padres y la falta de amor hacia ellos.
Poner en peligro el bien y la estabilidad de la familia, con relaciones que son contrarias al matrimonio, o con decisiones económicas
que no vayan en favor del bien de todos.
La falta de compromiso y amor par la patria.
El abandono de la familia y la ingratitud hacia los padres.
Coaccionar la libertad de las personas, e inducirlas a
la toma de decisiones en contra de su voluntad.
Promulgar leyes que van en contra de la unidad y la integralidad de la familia.
El anti testimonio y el escándalo.
QUINTO MANDAMIENTO:
NO MATARAS.
No matarás (Ex 20, 13).
Habéis oído que se dijo a los antepasados: “No matarás”; y aquel que mate será reo ante el tribunal. Pues yo os digo: Todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el tribunal (Mt 5, 21-22).
“La vida humana es sagrada, porque desde su inicio es fruto de la acción creadora de Dios y permanece siempre en una especial relación con el Creador, su único fin. Sólo Dios es Señor de la vida desde su comienzo hasta su término; nadie, en ninguna circunstancia, puede atribuirse el derecho de matar de modo directo a un ser humano inocente” (CDF,
Instr. "Donum vitae" intr. 5).
“¿Qué has hecho? Se oye la sangre de tu hermano clamar a mí desde el suelo. Pues bien: maldito seas, lejos de este suelo que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano” (Gn 4, 10-11).
Y yo os prometo reclamar vuestra propia sangre... Quien vertiere sangre de hombre, por otro hombre será su sangre vertida, porque a imagen de Dios hizo él al hombre (Gn 9, 5-6). “No quites la vida del inocente y justo” (Ex 23, 7). El homicidio voluntario de un inocente es gravemente contrario a la dignidad del ser humano, a la regla de oro y a la santidad del Creador.
En el Sermón de la Montaña, el Señor recuerda el precepto: “No matarás” (Mt 5, 21), y añade el rechazo absoluto de la ira, del odio y de la venganza. Más aún, Cristo exige a sus discípulos presentar la otra mejilla (Cf. Mt 5, 22-39), amar a los enemigos (Cf. Mt 5, 44). El mismo no se defendió y dijo a Pedro que guardase la espada en la vaina (Cf. Mt 26, 52).
EL QUINTO MANDAMIENTO NOS PROHÍBE:
homicidio directo y voluntario. El que mata y los que cooperan voluntariamente con él cometen un pecado que clama venganza al cielo (Cf. Gn 4, 10).
prohíbe exponer a alguien sin razón grave a un riesgo mortal, así como negar la asistencia a una persona en peligro.
El aborto directo, es decir, querido como un fin o como un medio, La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida (Cf. CDF, instr. "Donum vitae" 1, 1).
Prohíbe la Eutanasia porque Aquellos cuya vida se encuentra disminuida o debilitada tienen derecho a un respeto especial. Las personas enfermas o disminuidas deben ser atendidas para que lleven una vida tan normal como sea posible. Cualesquiera
Que sean los motivos y los medios, la eutanasia directa consiste en poner fin a la vida de personas disminuidas, enfermas o moribundas.
El suicidio porque contradice la inclinación natural del ser humano a conservar y perpetuar su vida.
Poner en peligro la seguridad de los demás y la suya Propia con el uso indiscriminado de medicamentos o drogas ilegales.
Prohíbe el odio y la violencia, y las practicas como el secuestro, la tortura la violación.
Prohíbe el descuido de la salud.
No solo se produce la muerte física, también se puede causar la muerte moral a una persona, por esto se nos prohíbe también la calumnia, la difamación, la ridiculización de los demás, etc.…
El infanticidio, el fratricidio, el parricidio.
QUE NOS PIDE EL QUINTO MANDAMIENTO:
Nos pide defender la vida desde la concepción, el ser humano desde su concepción es hijo de Dios y tiene toda la dignidad de persona, y debe ser protegido en su condición de indefensión.
No provocarla muerte a ninguna persona.
Velar por el bienestar de las personas enfermas e indefensas, procurando que
puedan vivir aun en su enfermedad de una manera digna.
Cuidar la salud propia, no abusar del alcohol o las drogas alucinógenas.
No atribuirse el derecho de decidir sobre la vida de otra persona (matar).
Reconocer la vida como don y a Dios como su único dueño.
Amar y tolerar a los enemigos.
SEXTO MANDAMIENTO:
NO COMETERÁS ADULTERIO.
No cometerás adulterio (Ex 20, 14; Dt 5, 17).
“Dios es amor y vive en sí mismo un misterio de comunión personal de amor.
Creándola a su imagen... Dios inscribe en la humanidad del hombre y de la mujer la vocación, y consiguientemente la capacidad y la responsabilidad del amor y de la comunión” (FC 11).
“Dios creó el hombre a imagen suya... hombre y mujer los creó” (Gn 1, 27). “Creced y multiplicaos” (Gn 1, 28); “el día en que Dios creó al hombre, le hizo a imagen de Dios.
Jesús vino a restaurar la creación en la pureza de sus orígenes. En el Sermón de la Montaña interpreta de manera rigurosa el plan de Dios: “Habéis oído que se dijo: “no cometerás adulterio”. Pues yo os digo: “Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón”“(Mt 5, 27-28). El hombre no debe separar lo que Dios ha unido (Cf. Mt 19, 6).
La castidad es una virtud moral. Es también un don de Dios, una gracia, un fruto del trabajo espiritual (Cf. Ga 5, 22). El Espíritu Santo concede, al que ha sido regenerado por el agua del bautismo, imitar la pureza de Cristo (Cf. 1 Jn 3, 3).
QUE NOS PROHÍBE EL SEXTO MANDAMIENTO:
La lujuria es un deseo o un goce desordenados del placer venéreo. El placer sexual es moralmente desordenado cuando es buscado por sí mismo, separado de las finalidades de procreación y de unión.
La masturbación que se ha de entender como la excitación voluntaria de los órganos genitales a fin de obtener un placer venéreo.
La fornicación que es la unión carnal entre un hombre y una mujer fuera del matrimonio. Es gravemente contraria a la dignidad de las personas y de la sexualidad humana.
La pornografía que consiste en dar a conocer actos sexuales, reales o simulados, fuera de la intimidad de los protagonistas, exhibiéndolos ante terceras personas de manera deliberada. Ofende la castidad porque desnaturaliza la finalidad del acto sexual.
La prostitución por que atenta contra la dignidad de la persona que se
prostituye, puesto que queda reducida al placer venéreo que se saca de ella. El que paga peca gravemente contra sí mismo: quebranta la castidad a la que lo comprometió su bautismo y mancha su cuerpo, templo del Espíritu Santo (Cf. 1 Co 6, 15-20). La prostitución constituye una lacra social.
La violación que es forzar o agredir con violencia la intimidad sexual de una persona. Atenta contra la justicia y la caridad. La violación lesiona profundamente el derecho de cada uno al respeto, a la libertad, a la integridad física y moral.
La homosexualidad que designa las relaciones entre hombres o mujeres que
experimentan una atracción sexual, exclusiva o predominante, hacia personas del mismo sexo.
Incesto es la relación carnal entre parientes dentro de los grados en que está
prohibido el matrimonio Se puede equiparar al incesto los abusos sexuales
perpetrados por adultos en niños o adolescentes
confiados a su guarda.
Poligamia o poliandria por que no se ajusta a la ley moral, pues contradice radicalmente la comunión conyugal.
El divorcio por que adquiere un carácter inmoral a causa del desorden que introduce en la célula familiar y en la sociedad.
El onanismo (interrupción del coito) como método de planificación.
Zoofilia relaciones sexuales con animales.
Los métodos anticonceptivos esterilizan tés.
El consentir pensamientos impuros e incurrir en conversaciones indelicadas.
La necrofilia y la pedofilia.
QUE NOS PIDE EL SEXTO MANDAMIENTO:
La castidad como respeto a nuestro cuerpo que es imagen y semejanza de Dios.
La pureza de corazón, ser puros en nuestras miradas, conversaciones y acciones.
Respetar la integridad sexual y moral de las demás personas.
Reconocer nuestra identidad sexual natural, y respetarla como don de Dios.
La templanza y el dominio de sí mismo.
SÉPTIMO MANDAMIENTO: NO ROBAR.
No robarás (Ex 20, 15; Dt 5,19).
No robarás (Mt 19, 18).
No hurtéis; no mentiréis; no os engañéis unos a otros. (Lv. 19,11).
Si un ladrón es sorprendido en el acto y es herido de muerte, no hay delito de sangre. Más si ya había salido el sol, entonces si hay delito de sangre. El ladrón debe restituir, si no tiene con que, será vendido para restituir por su robo. (Ex.22, 1-2).
No tendrás en tu bolsa dos pesas distintas, una grande y una pequeña. (Dt.25, 13)
Al comienzo Dios confió la tierra y sus recursos a la administración común de la humanidad para que tuviera cuidado de ellos, los dominaran mediante su trabajo y se beneficiara de sus frutos (Cf. Gn 1, 26-29). Los bienes de la creación están destinados a todo el género humano. Sin embargo, la tierra está repartida entre los hombres para dar seguridad a su vida, expuesta a la penuria y amenazada por la violencia. La apropiación de bienes es legítima para garantizar la libertad y la dignidad de las personas, para ayudar a cada uno a atender sus necesidades fundamentales y las necesidades de los que están a su cargo. Debe hacer posible que se viva una solidaridad natural entre los hombres.
QUE NOS PROHÍBE EL SÉPTIMO MANDAMIENTO:
El séptimo mandamiento prohíbe tomar o retener el bien del prójimo injustamente y perjudicar de cualquier manera al prójimo en sus bienes.
El séptimo mandamiento prohíbe el robo, es decir, la usurpación del bien ajeno contra la voluntad razonable de su dueño.
Retener deliberadamente bienes prestados u objetos perdidos, defraudar en el ejercicio del comercio (Cf. Dt 25, 13-16), pagar salarios injustos (Cf. Dt 24,14-15; St 5,4), elevar los precios especulando con la
ignorancia o la necesidad ajenas (Cf. Am 8, 4-6).
Apostar injustamente o hacer trampas en los juegos.
La corrupción y el uso indebido de de los bienes sociales y de inversión pública.
La falsificación de documentos, el fraude fiscal y los gastos excesivos.
Los daños tanto en la propiedad privada como publica.
El maltrato animal.
La ambición, (apetito de dinero) y La promoción de ideologías consumistas.
QUE NOS PIDE EL SÉPTIMO MANDAMIENTO:
Prescribe la justicia y la caridad en la gestión de los bienes terrenos y de los frutos del trabajo de los hombres.
Exige el respeto del destino universal de los bienes y del
derecho de propiedad privada.
La autoridad política tiene el deber de regular en función del bien común el ejercicio legítimo del derecho de propiedad.
La práctica de la virtud de la templanza, para moderar el apego a los bienes de este mundo.
La justicia, para preservar los derechos del prójimo y darle lo que le es debido.
La solidaridad, siguiendo la regla de oro y según la generosidad del Señor, que “siendo rico, por vosotros se hizo pobre a fin de que os enriquecierais con su pobreza” (2 Co 8, 9).
Cumplir las promesas, y los contratos rigurosamente observados en la medida en que el compromiso adquirido es moralmente justo.
Que todo contrato sea hecho y ejecutado de buena fe.
El pago de las deudas y el cumplimiento de obligaciones libremente contraídas.
El séptimo mandamiento exige el respeto de la
integridad de la creación. Los animales, como las plantas y los seres inanimados.
El buen manejo de las políticas económicas y la regulación del mercado.
Buscar el bien común y el trabajo digno para todas las personas, con un salario justo.
El amor por los pobres y la práctica de las obras de misericordia.
OCTAVO MANDAMIENTO:
NO LEVANTAR FALSO TESTIMONIO NI MENTIR.
No darás testimonio falso contra tu prójimo (Ex 20, 16).
Se dijo a los antepasados: No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos (Mt 5, 33).
En Jesucristo la verdad de Dios se manifestó en plenitud. “Lleno de gracia y de verdad” (Jn 1, 14), él es la “luz del mundo” (Jn 8, 12), la Verdad (Cf. Jn 14, 6). El que cree en él, no permanece en las tinieblas (Cf. Jn 12, 46). El discípulo de Jesús, “permanece en su palabra”, para conocer “la verdad que hace libre” (Cf. Jn 8, 31-32) y que santifica (Cf. Jn 17, 17). Seguir a Jesús es vivir del “Espíritu de verdad” (Jn 14, 17) que el Padre envía en su nombre (Cf. Jn 14, 26) y que conduce “a la verdad completa” (Jn 16, 13). Jesús enseña a sus discípulos el amor incondicional de la verdad: “Sea vuestro lenguaje: “sí, sí”; “no, no”“(Mt 5, 37).
“Si decimos que estamos en comunión con él, y caminamos en tinieblas, mentimos y no obramos conforme a la verdad” (1 Jn 1, 6).
QUE NOS PROHÍBE EL OCTAVO MANDAMIENTO:
Prohíbe falsear la verdad en las relaciones con el prójimo.
Falso testimonio y perjurio.
El juicio temerario el que, incluso tácitamente, admite como verdadero, sin tener para ello fundamento suficiente, un defecto moral en el prójimo.
La maledicencia el que, sin razón objetivamente válida, manifiesta los defectos y las faltas de otros a personas que los ignoran.
La calumnia el que, mediante palabras contrarias a la verdad, daña la reputación de otros y da ocasión a juicios falsos respecto a ellos.
La mentira que consiste en decir falsedad con intención de engañar.
La vanagloria o jactancia constituye una falta contra la verdad. Lo mismo sucede con la ironía que trata de ridiculizar a uno caricaturizando de manera malévola tal o cual aspecto de su comportamiento.
QUE NOS PIDE EL OCTAVO MANDAMIENTO:
La verdad como rectitud de la acción y de la palabra humana.
“vivir en la verdad”, es decir, en la simplicidad de una vida conforme al ejemplo del Señor y permaneciendo en su Verdad.
El testimonio en un acto de justicia que establece o da a conocer la verdad.
El respeto de la reputación de las personas.
El bien y la seguridad del prójimo, el respeto de la vida privada, el bien común.
Guardar la justa reserva respecto a la vida privada de la gente.
Reparar las ofensas hechas al prójimo.
NOVENO MANDAMIENTO:
NO DESEAR LA MUJER DEL PRÓJIMO.
No codiciarás la casa de tu prójimo, ni codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo (Ex 20, 17).
El que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón (Mt 5, 28).
En sentido etimológico, la “concupiscencia” puede designar toda forma vehemente de deseo humano. La teología cristiana le ha dado el sentido particular de un movimiento del apetito sensible que contraría la obra de la razón humana. El apóstol san Pablo la identifica con la lucha que la “carne” sostiene contra el “espíritu” (Cf. Gal 5, 16.17.24; Ef. 2, 3). Procede de la desobediencia del primer pecado (Gn 3, 11). Desordena las facultades
Morales del hombre y, sin ser una falta en sí misma, le inclina a cometer pecados (Cf. Cc Trento: DS 1515).
El corazón es la sede de la personalidad moral: “de dentro del corazón salen las intenciones malas, asesinatos, adulterios, fornicaciones” (Mt 15, 19). La lucha contra la concupiscencia de la carne pasa por la purificación del corazón: Mantente en la simplicidad, la inocencia y serás como los niños pequeños que ignoran el mal destructor de la vida de los hombres (Hermas, mand. 2, 1). La sexta bienaventuranza proclama: Bienaventurados los limpios de corazón porque ellos verán a Dios" (Mt 5,8). Los "corazones limpios" designan a los que han ajustado su inteligencia y su voluntad a las exigencias de la santidad de Dios, principalmente en tres dominios: la caridad (Cf. 1 Tm 4, 3-9; 2 Tm 2, 22), la castidad o rectitud sexual (Cf. 1 Ts 4, 7; Col 3, 5; Ef. 4, 19), el amor de la verdad y la ortodoxia de la fe (Cf. Tt 1, 15; 1 Tm 3-4; 2 Tm 2, 23-26). Existe un vínculo entre la pureza del corazón, del cuerpo y de la fe.
QUE NOS PIDE EL NOVENO MANDAMIENTO:
la virtud y el don de la castidad, pues la castidad permite amar con un corazón recto e indiviso.
la pureza de intención, que consiste en buscar el fin verdadero del hombre:
con una mirada limpia el bautizado se afana por encontrar y realizar en todo la voluntad de Dios (Cf. Rm. 12, 2; Col 1, 10).
la pureza de la mirada exterior e interior; mediante la disciplina de los sentidos
y la imaginación; mediante el rechazo de toda complacencia en los pensamientos impuros que inclinan a apartarse del camino de los
Mandamientos divinos: “la vista despierta la pasión de los insensatos” (Sb 15, 5).
exige el pudor. Este es parte integrante de la templanza. El pudor preserva
la intimidad de la persona. Designa el rechazo a mostrar lo que debe permanecer velado. Está ordenado a la castidad, cuya delicadeza proclama. Ordena las miradas y los gestos en conformidad con la dignidad de las personas y con la relación que existe entre ellas.
Considerar el cuerpo humano como templo del espíritu santo.
QUE NOS PROHÍBE EL NOVENO MANDAMIENTO.
Desear la mujer del prójimo.
Dejarnos dominar por la concupiscencia.
El exhibicionismo, el erotismo, y el ser permisivos con conductas
inapropiadas que causen escándalo.
Las conversaciones morbosas y el hacer públicas las confidencias intimas.
DECIMO MANDAMIENTO:
NO CODICIAR LOS BIENES AJENOS.
No codiciarás... nada que sea de tu prójimo (Ex 20, 17).
No desearás... su casa, su campo, su siervo o su sierva, su buey o su asno: nada que sea de tu prójimo (Dt 5, 21).
Donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón (Mt 6, 21).
El décimo mandamiento desdobla y completa el noveno, que versa sobre la
Concupiscencia de la carne. Prohíbe la codicia del bien ajeno, raíz del robo, de la rapiña y del fraude, prohibidos por el séptimo mandamiento. La “concupiscencia de los ojos” (Cf. 1 Jn 2, 16) lleva a la violencia y la injusticia prohibidas por el quinto precepto (Cf. Mi 2, 2). La codicia tiene
su origen, como la fornicación, en la idolatría condenada en las tres primeras prescripciones de la ley (Cf. Sb 14, 12). El décimo mandamiento se refiere a la intención del corazón; resume, con el noveno, todos los preceptos de la Ley.
QUE NOS PROHÍBE EL DECIMO MANDAMIENTO:
El décimo mandamiento prohíbe la avaricia y el deseo de una apropiación
inmoderada de los bienes terrenos.
Prohíbe el deseo desordenado nacido de la pasión inmoderada de las riquezas y de su poder.
Prohíbe también el deseo de cometer una injusticia mediante la cual se dañaría al prójimo en sus bienes temporales.
La envidia que es un pecado capital. Manifiesta la tristeza experimentada ante el bien del prójimo y el deseo desordenado de poseerlo, aunque sea en forma indebida. Cuando desea al prójimo un mal grave es un pecado mortal.
El fraude como forma de apoderarse de los bienes del prójimo.
QUE NOS PIDE EL DECIMO MANDAMIENTO:
Exige que el bautizado ha de esforzarse por vivir en la humildad.
Pide que “Todos los cristianos... han de intentar orientar rectamente sus deseos para que el uso de las cosas de este mundo y el apego a las riquezas no les impidan, en contra del
espíritu de pobreza evangélica, buscar el amor perfecto” (LG 42).
El desprendimiento de las riquezas que es necesario para entrar en el Reino de los cielos. "Bienaventurados los pobres de corazón".
En este camino hacia la perfección, el Espíritu y la Esposa llaman a quien les escucha (Cf. Ap. 22, 17) a la comunión perfecta con Dios: Allí se dará la gloria verdadera; nadie será alabado allí por error o por adulación; los verdaderos honores no serán ni negados a quienes los merecen ni concedidos a los indignos; por otra parte, allí nadie indigno pretenderá
Honores, pues allí sólo serán admitidos los dignos. Allí reinará la verdadera paz, donde nadie experimentará oposición ni de sí mismo ni de otros. La recompensa de la virtud será Dios mismo, que ha dado la virtud y se
Prometió a ella como la recompensa mejor y más grande que puede existir: "Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo" (Lv 26, 12)... Este es también el sentido de las palabras del apóstol: "para que Dios sea todo en todos" (1
Co 15, 28). Él será el fin de nuestros deseos, a quien contemplaremos sin fin, amaremos sin saciedad, alabaremos sin cansancio. Y este don, este amor, esta ocupación serán ciertamente, como la vida eterna, comunes a todos (S. Agustín, civ. 22,30).
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ.
Los mandamientos de la Iglesia se sitúan en la línea de una vida moral referida a la vida litúrgica y que se alimenta de ella. El carácter obligatorio de estas leyes positivas promulgadas por la autoridad eclesiástica tiene por fin garantizar a los fieles el mínimo indispensable en el espíritu de oración y en el esfuerzo moral, en el crecimiento del amor de Dios y del prójimo. Los mandamientos más generales de la Santa Madre Iglesia son cinco:
El primer mandamiento:
[oír misa entera los domingos y fiestas de precepto] exige a los fieles participar en la celebración eucarística, en la que se reúne la comunidad cristiana, el día en que conmemora la Resurrección del Señor, y en aquellas principales fiestas litúrgicas que conmemoran los misterios del Señor, la Virgen María y los santos.
El segundo mandamiento:
(Confesar los pecados mortales al menos una vez al año, y en peligro de muerte, y si se ha de comulgar) asegura la preparación para la Eucaristía mediante la recepción del sacramento de la Reconciliación, que continúa la obra de conversión y de perdón del Bautismo.
El tercer mandamiento:
(Comulgar por Pascua de Resurrección) garantiza un mínimo en la recepción del Cuerpo y la Sangre del Señor en relación con el tiempo de Pascua, origen y centro de la liturgia cristiana.
El cuarto mandamiento:
(Ayunar y abstenerse de comer carne cuando lo manda la Santa Madre Iglesia) asegura los tiempos de ascesis y de penitencia que nos preparan para las fiestas litúrgicas; contribuyen a hacernos adquirir el dominio sobre nuestros instintos y la libertad del corazón.
El quinto mandamiento:
(Ayudar a la Iglesia en sus necesidades) señala la obligación de ayudar, cada uno según su capacidad, a subvenir a las necesidades materiales de la Iglesia.
La santa madre iglesia nos da sus cinco mandamientos y frente a cada uno nos pide cumplir con unos compromisos, además también nos hace unas prohibiciones vamos a revisarlos uno a uno.
1. Celebrar misa todos los domingos y fiestas de precepto.
¿Que se nos pide la iglesia?
Participar activamente de la eucaristía.
Cuando no es posible cumplir el precepto el día ordenado hacerlo en la víspera del día anterior.
No realizar trajo servil.
Llegar temprano a la eucaristía y no salirse ant es de terminar.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Llegar tarde a la eucaristía.
Faltar a la eucaristía sin causa grave.
Trabajar.
Salir de la eucaristía sin haber terminado.
2. Confesar los pecados mortales al menos una vez al año y en peligro de muerte y si se ha de comulgar.
¿Que nos pide la iglesia?
Prepararse bien siguiendo los cinco pasos para una buena confesión con una actitud penitente.
Confesar los pecados mortales.
Prepararse espiritualmente para la comunión.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Comulgar en pecado grave.
Hacer una mala confesión de manera deliberada.
Permanecer en pecado mortal.
3. Comulgar por pascua de resurrección.
¿Que nos pide la iglesia?
Celebrar el misterio pascual.
Estar en gracia.
Participar de la eucaristía.
Comulgar no solo en pascua sino siempre que sea posible.
¿Que nos prohíbe la iglesia?
Permanecer por más de un año privado de la comunión.
La no celebración del misterio pascual de Cristo.
LOS MANDAMIENTOS DE LA LEY DE DIOS.
Éxodo 20, 2-17.
Yo soy Yahvé, tu Dios, que te he sacado del país de Egipto, del lugar de esclavitud
No tendrás otros dioses fuera de mí.
Note harás escultura ni imagen alguna
De lo que hay arriba en los cielos,
Abajo en la tierra o en las aguas debajo de la tierra.
No te postraras ante ellas ni les
Darás culto, porque Yo Yahvé, tu Dios,
Soy un Dios celoso, que castigo la iniquidad
De los padres en los hijos hasta la
Tercera y cuarta generación de los que
Me odian, pero tengo misericordia de
Mil generaciones con los que me aman y
Guardan mis mandamientos.
No pronunciaras el nombre de Yahvé,
Tu Dios, en falso; porque Yahvé no dejara sin castigo
A quien pronuncie su nombre en falso.
Recuerda el día del sábado para
Santificarlo. Seis días trabajaras y harás
Todos tus trabajos, pero el día séptimo
Es el día de descanso en honor de Yahvé, tu Dios.
No harás ningún trabajo, ni tú, ni tu hijo,
Ni tu hija, tu siervo, ni tu sierva,
Ni tu ganado, ni el forastero que habita en tu ciudad.
Pues en seis días hizo Yahvé el cielo y la tierra,
El mar y todo cuanto contienen, y el séptimo descanso.
Por eso bendijo Yahvé el día sábado y lo santifico.
Honra a tu padre y a tu madre, para
Que se prolonguen tus días sobre la tierra
Que Yahvé, tu Dios, te va a dar.
No mataras.
No cometerás adulterio.
No robaras.
No darás testimonio falso contra tu prójimo.
No codiciaras la casa de tu prójimo,
Ni codiciaras la mujer de tu prójimo,
Ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno,
Ni nada que sea de tu prójimo.
PRIMER MANDAMIENTO:
AMAR A DIOS SOBRE TODAS LAS COSAS.
“Maestro, ¿qué he de hacer yo de bueno para conseguir la vida eterna?” Al joven que Le hace esta pregunta, Jesús responde primero invocando la necesidad de reconocer a Dios Como “el único Bueno”, como el Bien por excelencia y como la fuente de todo bien. Luego Jesús le declara: “Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos”. Y cita a su interlocutor los preceptos que se refieren al amor del prójimo: “No matarás, no cometerás Adulterio, no robarás, no levantarás testimonio falso, honra a tu padre y a tu madre”. Finalmente, Jesús resume estos mandamientos de una manera positiva: “Amarás a tu Prójimo como a ti mismo” (Mt 19, 16-19). (CEC.2052)
Es el más grande de todos los mandamientos ya nos lo dice Jesús “ amaras al señor tu Dios, con todo tu corazón , con toda tu alma y toda tu mente” .(Mt,22,37); “ al señor tu Dios adoraras y a él solo darás culto” (Mt,4,10); Cristo plenitud de la revelación con estas palabras reafirma el mandato dado desde el AT, “ únicamente preocupaos de guardar el mandato y la ley que os dio moisés, siervo de Yahvé: améis a Yahvé vuestro Dios , que sigáis siempre sus caminos, que guardéis sus mandamientos y os mantengáis unidos a él y le sirváis con todo vuestro corazón , y con toda vuestra alma.(Jos, 22,5);
Dios a través de Cada uno de los mandamientos nos invita a cumplir con una serie compromisos y a guardar unas prohibiciones frente a cada uno de los mandatos dados a la humanidad desde la antigua alianza por medio de moisés
Lo que nos prohíbe el primer mandamiento son las siguientes acciones o actitudes:
el rechazo a la autoridad eclesial.
Herejía.
Apostasía.
Cisma.
Idolatría.
Desesperación-presunción.
Odio a Dios.
Tibieza espiritual.
Tentar a Dios.
Politeísmo.
Indiferencia.
Panteísmo.
Ingratitud.
Incredulidad.
Sacrilegio.
Profanación.
Anti testimonio.
Profanación.
Como buenos cristianos debemos vigilar los compromisos que tenemos con cada uno de los mandamientos el primero nos pide:
Creer en Dios y dar testimonio de él.
Vigilar nuestra fe rechazando lo que se opone a ella.
Temor de ofender el amor de Dios y de provocar su castigo.
Evitar la desesperación o la presunción, confiar en Dios y esperar de él la salvación personal y el perdón de los pecados.
Adorarlo y reconocerlo como Dios creador y salvador.
Orar siempre sin desfallecer.
Hacer de nuestra vida un sacrificio de adoración y gratitud.
Practicar las virtudes teologales.
Fidelidad en las promesas hechas a Dios en manifestación de respeto por la majestad divina.
Practicar los consejos evangélicos.
Abrasas y practicar la verdad sobre todo en lo que se refiere a Dios.
Rendir a Dios un culto autentico.
Suscitar en las demás personas el amor por el bien y la verdad.
No obligar a nadie a actuar en contra de su conciencia.
Respetar el derecho a la libertad religiosa en las demás personas.
SEGUNDO MANDAMIENTO:
NO TOMARAS EN FALSO EL NOMBRE DEL SEÑOR TU DIOS.
Signo de nuestro respeto a Dios es no colocar su nombre como garantía de nuestra palabra “si decimos no hemos pecado, hacemos de él un mentiroso su palabra no está en nosotros” (1Jn.1, 10)
Varios pasajes de la sagrada escritura nos hacen referencia a este mandamiento. (Dt.5; St.5, 12; 2,7; Mt.5, 33-38; Nm.30, 3; Rm.2, 24.)
Respetar el nombre de nuestro Dios y no jurar por su nombre nos compromete con el cumplimiento de unos mandatos y prohibiciones derivados de este mandamiento.
ESTO ES LO QUE DIOS NOS PIDE EN ESTE MANDAMIENTO.
Respetar el nombre del señor y regular nuestra palabra en el uso de las cosas sagradas.
Dar testimonio del nombre del señor confesando su fe sin ceder al temor.
Usar el nombre del señor para bendecir, alabar y glorificar.
Aceptar la voluntad de Dios sin blasfemar contra él.
Fidelidad al nombre del señor.
Cumplir lo prometido en el nombre del señor.
No recurrir al nombre del señor por motivos fútiles.
Honrar la palabra.
EL RESPETO DEL NOMBRE DEL SEÑOR NOS PROHÍBE TAMBIÉN:
El uso de los apodos.
Irrespetar y usar mal el nombre del señor.
Abusar del nombre del señor poniéndolo de por medio en situaciones innecesarias.
El engaño y el ser mentirosos.
Blasfemar contra el nombre y la voluntad de Dios.
Faltar a las promesas hechas en el nombre del señor.
Recurrir al nombre del señor para justificar prácticas criminales.
El uso mágico del nombre divino.
Prohíbe el juramento en falso.
TERCER MANDAMIENTO:
SANTIFICAR EL DÍA DEL SEÑOR.
Dios que todo lo ha hecho perfecto nos pide santificar el domingo en acción de gracias y que lo glorifiquemos con nuestro descanso “recuerda el día del sábado para glorificarlo. Seis días trabajaras y harás todos tus trabajos, pero el día séptimo es el día de descanso para el señor, tú Dios. No harás ningún trabajo. (Ex.20, 8-10) otros textos bíblicos contienen este precepto y lo podemos encontrar en:
(Ex.20, 11; Gn.2, 3; Sal.118, 24; Hb.4, 4.10, 25.)
Como cristianos que somos debemos glorificar el nombre del señor y santificar el día séptimo por esto el tercer mandamiento nos pide:
Guardar el día séptimo que es el día del señor.
Ir a la celebración litúrgica dominical, dando culto a Dios.
Celebrar la resurrección del señor, centro y razón de nuestra fe cristiana.
Descansar y olvidarnos del trabajo, aprovechando para cultivar la vida familiar, cultural, social y religiosa, compartiendo con los hermanos en un ambiente de sano esparcimiento.
ESTE MANDAMIENTO TAMBIÉN NOS PROHÍBE:
Abstnernos de la celebración litúrgica dominical.
Realizar trabajos ambiciosos, o sin necesidad urgente.
Descuidar la vida familiar, social y religiosa por dedicarnos a la atención del trabajo.
Negar el culto a Dios.
CUARTO MANDAMIENTO:
HONRAR PADRE Y MADRE.
Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus días sobre la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar (Ex 20, 12).
Vivía sujeto a ellos (Lc 2, 51).
El Señor Jesús recordó también la fuerza de este “mandamiento de Dios” (Mc 7, 8 -13). El apóstol enseña: “Hijos, obedeced a vuestros padres en el Señor; porque esto es justo. “Honra a tu padre y a tu madre”, tal es el primer mandamiento que lleva consigo una promesa: “para que seas feliz y se prolongue tu vida sobre la tierra”“(Ef. 6,1-3; Cf. Dt 5 16).
Este mandamiento no se limita solo al respeto por los padres también se extiende a muchas otras cosas que nos pide:
Respeto y obediencia a los mayores (abuelos).
Honor respeto y defensa de la patria.
Que los entes gubernamentales protejan y defiendan la familia como fundamento de la sociedad.
Respeto y obediencia por los padres aun después de la mayoría de edad y corresponsabilidad con ellos.
Desde la familia dar la debida formación cristiana a los hijos.
Que la familia respete la libertad de los hijos para optar por una profesión en sus vidas.
El amor conyugal, fraterno, paternal y filial (amor en la familia).
El matrimonio como roca solida donde se debe fundamentar la familia.
El consejo dentro de la familia.
ESTE MANDAMIENTO NOS PROHÍBE:
El irrespeto por los padres y la falta de amor hacia ellos.
Poner en peligro el bien y la estabilidad de la familia, con relaciones que son contrarias al matrimonio, o con decisiones económicas
que no vayan en favor del bien de todos.
La falta de compromiso y amor par la patria.
El abandono de la familia y la ingratitud hacia los padres.
Coaccionar la libertad de las personas, e inducirlas a
la toma de decisiones en contra de su voluntad.
Promulgar leyes que van en contra de la unidad y la integralidad de la familia.
El anti testimonio y el escándalo.
QUINTO MANDAMIENTO:
NO MATARAS.
No matarás (Ex 20, 13).
Habéis oído que se dijo a los antepasados: “No matarás”; y aquel que mate será reo ante el tribunal. Pues yo os digo: Todo aquel que se encolerice contra su hermano, será reo ante el tribunal (Mt 5, 21-22).
“La vida humana es sagrada, porque desde su inicio es fruto de la acción creadora de Dios y permanece siempre en una especial relación con el Creador, su único fin. Sólo Dios es Señor de la vida desde su comienzo hasta su término; nadie, en ninguna circunstancia, puede atribuirse el derecho de matar de modo directo a un ser humano inocente” (CDF,
Instr. "Donum vitae" intr. 5).
“¿Qué has hecho? Se oye la sangre de tu hermano clamar a mí desde el suelo. Pues bien: maldito seas, lejos de este suelo que abrió su boca para recibir de tu mano la sangre de tu hermano” (Gn 4, 10-11).
Y yo os prometo reclamar vuestra propia sangre... Quien vertiere sangre de hombre, por otro hombre será su sangre vertida, porque a imagen de Dios hizo él al hombre (Gn 9, 5-6). “No quites la vida del inocente y justo” (Ex 23, 7). El homicidio voluntario de un inocente es gravemente contrario a la dignidad del ser humano, a la regla de oro y a la santidad del Creador.
En el Sermón de la Montaña, el Señor recuerda el precepto: “No matarás” (Mt 5, 21), y añade el rechazo absoluto de la ira, del odio y de la venganza. Más aún, Cristo exige a sus discípulos presentar la otra mejilla (Cf. Mt 5, 22-39), amar a los enemigos (Cf. Mt 5, 44). El mismo no se defendió y dijo a Pedro que guardase la espada en la vaina (Cf. Mt 26, 52).
EL QUINTO MANDAMIENTO NOS PROHÍBE:
homicidio directo y voluntario. El que mata y los que cooperan voluntariamente con él cometen un pecado que clama venganza al cielo (Cf. Gn 4, 10).
prohíbe exponer a alguien sin razón grave a un riesgo mortal, así como negar la asistencia a una persona en peligro.
El aborto directo, es decir, querido como un fin o como un medio, La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida (Cf. CDF, instr. "Donum vitae" 1, 1).
Prohíbe la Eutanasia porque Aquellos cuya vida se encuentra disminuida o debilitada tienen derecho a un respeto especial. Las personas enfermas o disminuidas deben ser atendidas para que lleven una vida tan normal como sea posible. Cualesquiera
Que sean los motivos y los medios, la eutanasia directa consiste en poner fin a la vida de personas disminuidas, enfermas o moribundas.
El suicidio porque contradice la inclinación natural del ser humano a conservar y perpetuar su vida.
Poner en peligro la seguridad de los demás y la suya Propia con el uso indiscriminado de medicamentos o drogas ilegales.
Prohíbe el odio y la violencia, y las practicas como el secuestro, la tortura la violación.
Prohíbe el descuido de la salud.
No solo se produce la muerte física, también se puede causar la muerte moral a una persona, por esto se nos prohíbe también la calumnia, la difamación, la ridiculización de los demás, etc.…
El infanticidio, el fratricidio, el parricidio.
QUE NOS PIDE EL QUINTO MANDAMIENTO:
Nos pide defender la vida desde la concepción, el ser humano desde su concepción es hijo de Dios y tiene toda la dignidad de persona, y debe ser protegido en su condición de indefensión.
No provocarla muerte a ninguna persona.
Velar por el bienestar de las personas enfermas e indefensas, procurando que
puedan vivir aun en su enfermedad de una manera digna.
Cuidar la salud propia, no abusar del alcohol o las drogas alucinógenas.
No atribuirse el derecho de decidir sobre la vida de otra persona (matar).
Reconocer la vida como don y a Dios como su único dueño.
Amar y tolerar a los enemigos.
SEXTO MANDAMIENTO:
NO COMETERÁS ADULTERIO.
No cometerás adulterio (Ex 20, 14; Dt 5, 17).
“Dios es amor y vive en sí mismo un misterio de comunión personal de amor.
Creándola a su imagen... Dios inscribe en la humanidad del hombre y de la mujer la vocación, y consiguientemente la capacidad y la responsabilidad del amor y de la comunión” (FC 11).
“Dios creó el hombre a imagen suya... hombre y mujer los creó” (Gn 1, 27). “Creced y multiplicaos” (Gn 1, 28); “el día en que Dios creó al hombre, le hizo a imagen de Dios.
Jesús vino a restaurar la creación en la pureza de sus orígenes. En el Sermón de la Montaña interpreta de manera rigurosa el plan de Dios: “Habéis oído que se dijo: “no cometerás adulterio”. Pues yo os digo: “Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón”“(Mt 5, 27-28). El hombre no debe separar lo que Dios ha unido (Cf. Mt 19, 6).
La castidad es una virtud moral. Es también un don de Dios, una gracia, un fruto del trabajo espiritual (Cf. Ga 5, 22). El Espíritu Santo concede, al que ha sido regenerado por el agua del bautismo, imitar la pureza de Cristo (Cf. 1 Jn 3, 3).
QUE NOS PROHÍBE EL SEXTO MANDAMIENTO:
La lujuria es un deseo o un goce desordenados del placer venéreo. El placer sexual es moralmente desordenado cuando es buscado por sí mismo, separado de las finalidades de procreación y de unión.
La masturbación que se ha de entender como la excitación voluntaria de los órganos genitales a fin de obtener un placer venéreo.
La fornicación que es la unión carnal entre un hombre y una mujer fuera del matrimonio. Es gravemente contraria a la dignidad de las personas y de la sexualidad humana.
La pornografía que consiste en dar a conocer actos sexuales, reales o simulados, fuera de la intimidad de los protagonistas, exhibiéndolos ante terceras personas de manera deliberada. Ofende la castidad porque desnaturaliza la finalidad del acto sexual.
La prostitución por que atenta contra la dignidad de la persona que se
prostituye, puesto que queda reducida al placer venéreo que se saca de ella. El que paga peca gravemente contra sí mismo: quebranta la castidad a la que lo comprometió su bautismo y mancha su cuerpo, templo del Espíritu Santo (Cf. 1 Co 6, 15-20). La prostitución constituye una lacra social.
La violación que es forzar o agredir con violencia la intimidad sexual de una persona. Atenta contra la justicia y la caridad. La violación lesiona profundamente el derecho de cada uno al respeto, a la libertad, a la integridad física y moral.
La homosexualidad que designa las relaciones entre hombres o mujeres que
experimentan una atracción sexual, exclusiva o predominante, hacia personas del mismo sexo.
Incesto es la relación carnal entre parientes dentro de los grados en que está
prohibido el matrimonio Se puede equiparar al incesto los abusos sexuales
perpetrados por adultos en niños o adolescentes
confiados a su guarda.
Poligamia o poliandria por que no se ajusta a la ley moral, pues contradice radicalmente la comunión conyugal.
El divorcio por que adquiere un carácter inmoral a causa del desorden que introduce en la célula familiar y en la sociedad.
El onanismo (interrupción del coito) como método de planificación.
Zoofilia relaciones sexuales con animales.
Los métodos anticonceptivos esterilizan tés.
El consentir pensamientos impuros e incurrir en conversaciones indelicadas.
La necrofilia y la pedofilia.
QUE NOS PIDE EL SEXTO MANDAMIENTO:
La castidad como respeto a nuestro cuerpo que es imagen y semejanza de Dios.
La pureza de corazón, ser puros en nuestras miradas, conversaciones y acciones.
Respetar la integridad sexual y moral de las demás personas.
Reconocer nuestra identidad sexual natural, y respetarla como don de Dios.
La templanza y el dominio de sí mismo.
SÉPTIMO MANDAMIENTO: NO ROBAR.
No robarás (Ex 20, 15; Dt 5,19).
No robarás (Mt 19, 18).
No hurtéis; no mentiréis; no os engañéis unos a otros. (Lv. 19,11).
Si un ladrón es sorprendido en el acto y es herido de muerte, no hay delito de sangre. Más si ya había salido el sol, entonces si hay delito de sangre. El ladrón debe restituir, si no tiene con que, será vendido para restituir por su robo. (Ex.22, 1-2).
No tendrás en tu bolsa dos pesas distintas, una grande y una pequeña. (Dt.25, 13)
Al comienzo Dios confió la tierra y sus recursos a la administración común de la humanidad para que tuviera cuidado de ellos, los dominaran mediante su trabajo y se beneficiara de sus frutos (Cf. Gn 1, 26-29). Los bienes de la creación están destinados a todo el género humano. Sin embargo, la tierra está repartida entre los hombres para dar seguridad a su vida, expuesta a la penuria y amenazada por la violencia. La apropiación de bienes es legítima para garantizar la libertad y la dignidad de las personas, para ayudar a cada uno a atender sus necesidades fundamentales y las necesidades de los que están a su cargo. Debe hacer posible que se viva una solidaridad natural entre los hombres.
QUE NOS PROHÍBE EL SÉPTIMO MANDAMIENTO:
El séptimo mandamiento prohíbe tomar o retener el bien del prójimo injustamente y perjudicar de cualquier manera al prójimo en sus bienes.
El séptimo mandamiento prohíbe el robo, es decir, la usurpación del bien ajeno contra la voluntad razonable de su dueño.
Retener deliberadamente bienes prestados u objetos perdidos, defraudar en el ejercicio del comercio (Cf. Dt 25, 13-16), pagar salarios injustos (Cf. Dt 24,14-15; St 5,4), elevar los precios especulando con la
ignorancia o la necesidad ajenas (Cf. Am 8, 4-6).
Apostar injustamente o hacer trampas en los juegos.
La corrupción y el uso indebido de de los bienes sociales y de inversión pública.
La falsificación de documentos, el fraude fiscal y los gastos excesivos.
Los daños tanto en la propiedad privada como publica.
El maltrato animal.
La ambición, (apetito de dinero) y La promoción de ideologías consumistas.
QUE NOS PIDE EL SÉPTIMO MANDAMIENTO:
Prescribe la justicia y la caridad en la gestión de los bienes terrenos y de los frutos del trabajo de los hombres.
Exige el respeto del destino universal de los bienes y del
derecho de propiedad privada.
La autoridad política tiene el deber de regular en función del bien común el ejercicio legítimo del derecho de propiedad.
La práctica de la virtud de la templanza, para moderar el apego a los bienes de este mundo.
La justicia, para preservar los derechos del prójimo y darle lo que le es debido.
La solidaridad, siguiendo la regla de oro y según la generosidad del Señor, que “siendo rico, por vosotros se hizo pobre a fin de que os enriquecierais con su pobreza” (2 Co 8, 9).
Cumplir las promesas, y los contratos rigurosamente observados en la medida en que el compromiso adquirido es moralmente justo.
Que todo contrato sea hecho y ejecutado de buena fe.
El pago de las deudas y el cumplimiento de obligaciones libremente contraídas.
El séptimo mandamiento exige el respeto de la
integridad de la creación. Los animales, como las plantas y los seres inanimados.
El buen manejo de las políticas económicas y la regulación del mercado.
Buscar el bien común y el trabajo digno para todas las personas, con un salario justo.
El amor por los pobres y la práctica de las obras de misericordia.
OCTAVO MANDAMIENTO:
NO LEVANTAR FALSO TESTIMONIO NI MENTIR.
No darás testimonio falso contra tu prójimo (Ex 20, 16).
Se dijo a los antepasados: No perjurarás, sino que cumplirás al Señor tus juramentos (Mt 5, 33).
En Jesucristo la verdad de Dios se manifestó en plenitud. “Lleno de gracia y de verdad” (Jn 1, 14), él es la “luz del mundo” (Jn 8, 12), la Verdad (Cf. Jn 14, 6). El que cree en él, no permanece en las tinieblas (Cf. Jn 12, 46). El discípulo de Jesús, “permanece en su palabra”, para conocer “la verdad que hace libre” (Cf. Jn 8, 31-32) y que santifica (Cf. Jn 17, 17). Seguir a Jesús es vivir del “Espíritu de verdad” (Jn 14, 17) que el Padre envía en su nombre (Cf. Jn 14, 26) y que conduce “a la verdad completa” (Jn 16, 13). Jesús enseña a sus discípulos el amor incondicional de la verdad: “Sea vuestro lenguaje: “sí, sí”; “no, no”“(Mt 5, 37).
“Si decimos que estamos en comunión con él, y caminamos en tinieblas, mentimos y no obramos conforme a la verdad” (1 Jn 1, 6).
QUE NOS PROHÍBE EL OCTAVO MANDAMIENTO:
Prohíbe falsear la verdad en las relaciones con el prójimo.
Falso testimonio y perjurio.
El juicio temerario el que, incluso tácitamente, admite como verdadero, sin tener para ello fundamento suficiente, un defecto moral en el prójimo.
La maledicencia el que, sin razón objetivamente válida, manifiesta los defectos y las faltas de otros a personas que los ignoran.
La calumnia el que, mediante palabras contrarias a la verdad, daña la reputación de otros y da ocasión a juicios falsos respecto a ellos.
La mentira que consiste en decir falsedad con intención de engañar.
La vanagloria o jactancia constituye una falta contra la verdad. Lo mismo sucede con la ironía que trata de ridiculizar a uno caricaturizando de manera malévola tal o cual aspecto de su comportamiento.
QUE NOS PIDE EL OCTAVO MANDAMIENTO:
La verdad como rectitud de la acción y de la palabra humana.
“vivir en la verdad”, es decir, en la simplicidad de una vida conforme al ejemplo del Señor y permaneciendo en su Verdad.
El testimonio en un acto de justicia que establece o da a conocer la verdad.
El respeto de la reputación de las personas.
El bien y la seguridad del prójimo, el respeto de la vida privada, el bien común.
Guardar la justa reserva respecto a la vida privada de la gente.
Reparar las ofensas hechas al prójimo.
NOVENO MANDAMIENTO:
NO DESEAR LA MUJER DEL PRÓJIMO.
No codiciarás la casa de tu prójimo, ni codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu prójimo (Ex 20, 17).
El que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón (Mt 5, 28).
En sentido etimológico, la “concupiscencia” puede designar toda forma vehemente de deseo humano. La teología cristiana le ha dado el sentido particular de un movimiento del apetito sensible que contraría la obra de la razón humana. El apóstol san Pablo la identifica con la lucha que la “carne” sostiene contra el “espíritu” (Cf. Gal 5, 16.17.24; Ef. 2, 3). Procede de la desobediencia del primer pecado (Gn 3, 11). Desordena las facultades
Morales del hombre y, sin ser una falta en sí misma, le inclina a cometer pecados (Cf. Cc Trento: DS 1515).
El corazón es la sede de la personalidad moral: “de dentro del corazón salen las intenciones malas, asesinatos, adulterios, fornicaciones” (Mt 15, 19). La lucha contra la concupiscencia de la carne pasa por la purificación del corazón: Mantente en la simplicidad, la inocencia y serás como los niños pequeños que ignoran el mal destructor de la vida de los hombres (Hermas, mand. 2, 1). La sexta bienaventuranza proclama: Bienaventurados los limpios de corazón porque ellos verán a Dios" (Mt 5,8). Los "corazones limpios" designan a los que han ajustado su inteligencia y su voluntad a las exigencias de la santidad de Dios, principalmente en tres dominios: la caridad (Cf. 1 Tm 4, 3-9; 2 Tm 2, 22), la castidad o rectitud sexual (Cf. 1 Ts 4, 7; Col 3, 5; Ef. 4, 19), el amor de la verdad y la ortodoxia de la fe (Cf. Tt 1, 15; 1 Tm 3-4; 2 Tm 2, 23-26). Existe un vínculo entre la pureza del corazón, del cuerpo y de la fe.
QUE NOS PIDE EL NOVENO MANDAMIENTO:
la virtud y el don de la castidad, pues la castidad permite amar con un corazón recto e indiviso.
la pureza de intención, que consiste en buscar el fin verdadero del hombre:
con una mirada limpia el bautizado se afana por encontrar y realizar en todo la voluntad de Dios (Cf. Rm. 12, 2; Col 1, 10).
la pureza de la mirada exterior e interior; mediante la disciplina de los sentidos
y la imaginación; mediante el rechazo de toda complacencia en los pensamientos impuros que inclinan a apartarse del camino de los
Mandamientos divinos: “la vista despierta la pasión de los insensatos” (Sb 15, 5).
exige el pudor. Este es parte integrante de la templanza. El pudor preserva
la intimidad de la persona. Designa el rechazo a mostrar lo que debe permanecer velado. Está ordenado a la castidad, cuya delicadeza proclama. Ordena las miradas y los gestos en conformidad con la dignidad de las personas y con la relación que existe entre ellas.
Considerar el cuerpo humano como templo del espíritu santo.
QUE NOS PROHÍBE EL NOVENO MANDAMIENTO.
Desear la mujer del prójimo.
Dejarnos dominar por la concupiscencia.
El exhibicionismo, el erotismo, y el ser permisivos con conductas
inapropiadas que causen escándalo.
Las conversaciones morbosas y el hacer públicas las confidencias intimas.
DECIMO MANDAMIENTO:
NO CODICIAR LOS BIENES AJENOS.
No codiciarás... nada que sea de tu prójimo (Ex 20, 17).
No desearás... su casa, su campo, su siervo o su sierva, su buey o su asno: nada que sea de tu prójimo (Dt 5, 21).
Donde esté tu tesoro, allí estará también tu corazón (Mt 6, 21).
El décimo mandamiento desdobla y completa el noveno, que versa sobre la
Concupiscencia de la carne. Prohíbe la codicia del bien ajeno, raíz del robo, de la rapiña y del fraude, prohibidos por el séptimo mandamiento. La “concupiscencia de los ojos” (Cf. 1 Jn 2, 16) lleva a la violencia y la injusticia prohibidas por el quinto precepto (Cf. Mi 2, 2). La codicia tiene
su origen, como la fornicación, en la idolatría condenada en las tres primeras prescripciones de la ley (Cf. Sb 14, 12). El décimo mandamiento se refiere a la intención del corazón; resume, con el noveno, todos los preceptos de la Ley.
QUE NOS PROHÍBE EL DECIMO MANDAMIENTO:
El décimo mandamiento prohíbe la avaricia y el deseo de una apropiación
inmoderada de los bienes terrenos.
Prohíbe el deseo desordenado nacido de la pasión inmoderada de las riquezas y de su poder.
Prohíbe también el deseo de cometer una injusticia mediante la cual se dañaría al prójimo en sus bienes temporales.
La envidia que es un pecado capital. Manifiesta la tristeza experimentada ante el bien del prójimo y el deseo desordenado de poseerlo, aunque sea en forma indebida. Cuando desea al prójimo un mal grave es un pecado mortal.
El fraude como forma de apoderarse de los bienes del prójimo.
QUE NOS PIDE EL DECIMO MANDAMIENTO:
Exige que el bautizado ha de esforzarse por vivir en la humildad.
Pide que “Todos los cristianos... han de intentar orientar rectamente sus deseos para que el uso de las cosas de este mundo y el apego a las riquezas no les impidan, en contra del
espíritu de pobreza evangélica, buscar el amor perfecto” (LG 42).
El desprendimiento de las riquezas que es necesario para entrar en el Reino de los cielos. "Bienaventurados los pobres de corazón".
En este camino hacia la perfección, el Espíritu y la Esposa llaman a quien les escucha (Cf. Ap. 22, 17) a la comunión perfecta con Dios: Allí se dará la gloria verdadera; nadie será alabado allí por error o por adulación; los verdaderos honores no serán ni negados a quienes los merecen ni concedidos a los indignos; por otra parte, allí nadie indigno pretenderá
Honores, pues allí sólo serán admitidos los dignos. Allí reinará la verdadera paz, donde nadie experimentará oposición ni de sí mismo ni de otros. La recompensa de la virtud será Dios mismo, que ha dado la virtud y se
Prometió a ella como la recompensa mejor y más grande que puede existir: "Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo" (Lv 26, 12)... Este es también el sentido de las palabras del apóstol: "para que Dios sea todo en todos" (1
Co 15, 28). Él será el fin de nuestros deseos, a quien contemplaremos sin fin, amaremos sin saciedad, alabaremos sin cansancio. Y este don, este amor, esta ocupación serán ciertamente, como la vida eterna, comunes a todos (S. Agustín, civ. 22,30).
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ.
lunes, 17 de octubre de 2011
reflexión la caridad y la vida sacerdotal.
LA CARIDAD Y LA VIDA SACERDOTAL.
Cristo es la fuente de donde debe beber alimentarse el presbítero para vivir la caridad.
CARIDAD HACIA LOS HERMANOS
q TIENE SU RAÍZ EN LA VIDA SACERDOTAL, ESA RAÍZ ESTÁ EN SU IDENTIDAD DE HOMBRE DE DIOS.
“Dios es amor” (1 Jn 4,8)
El presbítero debe alimentarse de Dios como su fuente para poder vivir la caridad hacia los hermanos.
Si “Dios es amor” El presbítero identificado con el debe ser un hombre de la caridad, (lleno de amor, testimonio) no habrá un verdadero celo apostólico sin el amor al prójimo. (Seriamos como el pastor asalariado que abandona el rebaño y huye ante las dificultades,)
q JESÚS NOS MUESTRA EL VÍNCULO ENTRE EL AMOR A DIOS Y EL AMOR AL PRÓJIMO.
Es una falacia decir que amamos a Dios si no amamos al prójimo; podemos decir que Dios es el centro de nuestra vida solo porque practicamos muchos actos de piedad. ¡No!. El amor se demuestra en obras.¿ Pero que dice nuestra actitu,? muchas veces nos negamos a hacer algún favor, hablamos de los demás, aislamos a compañeros.etc…)
El verdadero amor lo demostramos cuando nos negamos a nosotros mismos.
“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y amarás a tu prójimo como a ti mismo” (Mt 37, 39).
“si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo tome su cruz y sígame” (mt, 16,24)
La palabra de Dios muchas veces llega a nosotros y nos sucede como cuando cae la lluvia y salimos con un paraguas, estamos entre la lluvia el agua nos llega ligeramente pero no nos moja, que no nos suceda esto a nosotros con la palabra de Dios. Pocas veces reflexionamos esta palabra, y por esto no comprendemos su significado “si alguno quiere” , el llamado es en libertad de ningún modo estamos en este camino obligados significa que si en libertad elegimos el camino del señor con generosidad debemos responderle, “venir”, es ponernos en marcha haciendo un recorrido quizás en medio de caminos difíciles pero dándolo todo por llegar a la meta, es venir de un lugar distante a la cercanía de Dios. “niéguese a sí mismo” , se trata de colocar por encima de nuestros intereses la necesidad del hermano, doblegar nuestro orgullo buscando el bienestar de los demás antes que el mío, esto no implica solo el privarme de lo material eso no sirve de nada si no me dono a los demás. “tome su cruz y sígame” es recorrer el camino con amor aceptando nuestras debilidades y problemas, aun cuando la carga se hace pesada.
MISIÓN DE PASTORES
JESÚS DESCRIBE ESE AMOR COMO EL AMOR DE UN BUEN PASTOR; EL BUEN PASTOR AMA TANTO A SUS OVEJAS QUE ENTREGA SU VIDA POR ELLAS.
(CF. JN 10, 11. 15).
Estamos llamados a desgastar nuestra vidas ´por el reino, ir en buscar la oveja perdida en donde se encuentre, (misión) como el pastor que arriesga su vida por rescatar a la más débil.
POR LA ORDENACIÓN SACERDOTAL SE RECIBE DE CRISTO LA MISIÓN DE SER PASTOR, LLAMADO A TESTIMONIAR CON SUS OBRAS EL AMOR DEL BUEN PASTOR.
El sacerdocio nos consagra (misión) pero es una tarea que debemos asumir desde ya sino hoy no somos hombres de testimonio tampoco lo seremos mañana. La misión la vivimos todos los días, por eso debemos Hacer vida las palabras del profeta Ezequiel:
Yo mismo apacentare mis ovejas y yo las llevare a reposar, buscare la oveja perdida, hare volver a la descarriada, curare a la herida, confortare a la enferma.
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ.
reflexión la familia fundamentada en el sacramento del matrimonio.
LA FAMILIA FUNDAMENTADA EN EL SACRAMENTO DEL MATRIMONIO.
Matrimonio signo del amor de Dios por la humanidad y de la entrega de Cristo por su esposa, la iglesia. Desde esta alianza de amor, se despliegan la paternidad y la maternidad, la filiación y la fraternidad, y el compromiso de los dos por una sociedad mejor.(DA,433)
No se puede hablar de la familia cómo algo aislado o improvisado que surge del parecer de un grupo de personas, la familia tiene su fundamento y su base mas solida en el sacramento del matrimonio, que se lleva a cabo entre un varón y una mujer; es allí donde se constituye de una manera seria y responsable el proyecto de unidad que Dios quiere para el hombre.
Cuando la familia no se fundamenta bajo el signo del amor de Dios es imposible hablar de plenitud en el hogar; en la sociedad actual se ha perdido el valor; hoy se está desfigurando su imagen considerando que personas del mismo sexo pueden casarse y peor que tienen derecho a la adopción de menores, esto no puede ser posible; la familia es conformada por un hombre y una mujer que son los que tienen el don natural de la procreación y la responsabilidad moral de educar a los hijos en la fe y las buenas costumbres por que la familia es por excelencia la primer escuela de formación cristiana.
Es ahí donde los hijos aprenden a:
Ø Vivir en comunidad: es en este ambiente donde el ser humano descubre que no es un ser aislado que por naturaleza tiene que relacionarse, tolerar y ayudarse.
Ø Los valores cristianos que le dan sentido a la vida. (amor por Dios, la oración, la iglesia, ayuda a los pobres obras de misericordia.)
Ø Valores éticos y morales. ( respeto por la dignidad de las personas, dignidad del propio cuerpo imagen y semejanza de Dios, honestidad,)
Ø Desde y con la familia proyecta su vida. (guía y acompaña en los diferentes procesos del ser humano buscando llegar a la realización no atándolo pero tampoco permitiéndole el libertinaje.)
la familia tiene entonces una gran responsabilidad en la sociedad actual aunque parezca que estamos luchando contra viento y marea no podemos desfallecer en el trabajo por ella, por que es integradora de valores y es el semillero donde germina el futuro de la humanidad, mientras que la familia se siga desintegrando no podrá ser posible llegar a tener una sociedad equilibrada; si el ser humano no entiende y vive la familia como parte esencial de la vida cristiana vanos serán los esfuerzos por conseguir una paz y una equidad que tienen su raíz en el corazón de la familia.
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ.
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ.
domingo, 16 de octubre de 2011
FAMILIA CENTRO DE LA VIDA CRISTIANA ( ensayo sobre el docomento de Aparecida)
Todos los cristianos tenemos la gran responsabilidad, de custodiar la fe del pueblo de Dios, esta es nuestra tarea como auténticos cristianos que debemos ser.[1]
Nos vemos enfrentados a una realidad nunca vista en la historia de la humanidad, la degradación social está llegando hasta sus más amplios limites fruto del ansia de poder del hombre; y de la forma forzada y facilista como busca obtener las cosas, pero es nuestro deber como discípulos misioneros empezar a trabajar por una visión diferente de la vida a la luz del evangelio y siguiendo el ejemplo de Cristo, para con nuestro testimonio empezar a edificar y evangelizar el entorno que nos rodea, desde las pequeñas comunidades. Asumiendo la misión, como algo que se hace desde lo más pequeño en el propio lugar donde nos encontramos, reconociendo las necesidades y debilidades de nuestras comunidades, y guiándolas a la luz del evangelio, teniendo en cuenta que todos somos misioneros sin importar el lugar donde nos encontremos.
Ser cristianos es algo que la mayoría de nosotros lo hemos recibido de nuestros padres como una herencia, pero ser cristianos va mucho más allá de esto, es algo que nosotros debemos elegir no por una idea o por una decisión ética[3] , sino por el encuentro real y personal con Cristo que nos abre un nuevo horizonte y nos lleva a vivir nuestra vida con una orientación decisiva, por esto en la iglesia cada uno de sus miembros está llamado a vivir con fuerza el amor de Cristo para convertirse en discípulo misionero que comunique con valentía y fuerza la buena nueva de Jesucristo “el mesías el hijo de Dios vivo.” (Mt. 16.)
Es tarea del discípulo misionero dar a conocer a Jesús como destino de plena felicidad para el hombre, que las pequeñas comunidades lo conozcan y entiendan que él, es el verbo encarnado de Dios, que con su vida nos dio ejemplo de comunidad, con sus palabras enseñó el nuevo mandamiento del amor y con su muerte y resurrección revela el misterio del amor misericordioso del padre.
Para los cristianos, la alegría se basa en el amor misericordioso del padre, por eso cada uno de nosotros como discípulos misioneros debemos vivir esa alegría representada en el misterio pascual de Cristo que por la acción del espíritu santo nos hace pasar de la muerte a la vida.
“El Dios de la alianza, rico en misericordia nos ha amado primero[4]”, no somos una coincidencia en el mundo, porque desde el origen de los tiempos antes que nos formáramos, fuimos planeados por Dios, de ahí que todos estamos llamados a difundir el mensaje de Jesús, sin temor a la contradicción que generaran nuestras palabras; debemos ser profetas en un mundo de contradicciones. (Cf. Jr. 1,5)
De acuerdo con la metodología que nos plantea el documento ver, juzgar y actuar, nosotros estamos llamados a no quedarnos simplemente como espectadores y testigos de una realidad que podemos ayudar a mejorar. Desde la palabra de Dios y el testimonio de vida que nos ha dejado Jesucristo, nosotros tenemos el deber como buenos y auténticos cristianos que debemos ser, de ponernos al servicio del pueblo de Dios; estamos viviendo una época muy difícil para la evangelización, la nueva era de las tecnologías, la moda, la globalización, el materialismo, y el consumismo, están envolviendo al hombre de hoy y lo están atrapando en un laberinto de donde el ser humano solo puede salir con la ayuda de Jesús.
La humanidad en su afán de poseer bienes materiales esta dejando de lado la espiritualidad y los preceptos de Dios, el hombre esta olvidando que todo nos procede de Dios y esta empezando a sentir superioridad y a creer que puede disponer de todo lo que esta a su alcance, entonces empieza a perder la orientación de su vida, cae en las drogas, en el desenfreno sexual, la violencia, y empieza a materializarse la profunda crisis social que están viviendo nuestros pueblos hoy. Crisis que tiene sus raíces en la degradación que están sufriendo las familias; hoy en la época que estamos viviendo la imagen de familia que nos propone Jesús que es vivir a ejemplo de la familia de Nazaret, está totalmente desdibujada, la sociedad quiere proponer un modelo de familia muy diferente, si es que así se le puede llamar; la modernidad llama a vivir una vida afectiva desordenada, donde nadie asume compromisos, un modelo que se convierte en la filosofía de vida para muchas personas que no asumen sus responsabilidades y solo buscan momentos de placeres y diversión, fruto de esto es el fenómeno de tantos niños que crecen sin su papá, y desde ahí empieza a desfigurarse lo que debe ser la unidad de la familia, fruto de este fenómeno empieza a generarse en la niñez y la juventud una serie de dificultades y vacios que en muchos casos es lo que esta desencadenando la situación de crisis en nuestra sociedad, este tipo de situaciones se presentan con mayor fuerza en los sectores urbanos; la falta de educación, las pocas oportunidades de empleo, la marginación, son el detonante de la crisis humana que estamos viviendo y ante estas realidades los cristianos debemos sentirnos comprometidos y obligados a hacer algo por las comunidades que están cerca de nosotros, porque estas son situaciones que se presentan en nuestro entorno más cercano y es ahí, donde debemos empezar nuestro proceso de evangelización, debemos crear conciencia de que, “ la familia es imagen de Dios, que en su misterio mas intimo, no es una soledad sino una familia”[5] por esto en nuestra sociedad es urgente llevar a las personas a valorar la familia, y tomar sentido de responsabilidad frente a la conformación de la familia. Es necesario educar a los jóvenes que son el futuro de la humanidad, en el sentido que miren la familia como un proyecto de vida, que los lleve a su realización, porque en la actualidad muchas familias no se están conformando como un proyecto, sino como un accidente fruto de la inmadurez y la falta de responsabilidad con que el joven está asumiendo su sexualidad, como una consecuencia de esto, muchas parejas están conformando lo que llaman una familia, obligados por un embarazo no deseado, o motivados por un falso amor que es fundamentado en la atracción física pero que desaparece con el tiempo a medida que se van descubriendo y conociendo el uno al otro; la unidad de la familia es algo que hemos recibido de Jesús cómo una herencia y como el más grande ejemplo de unidad cristiana, nuestros abuelos, lo han prolongado, de ellos hemos recibido la formación cristiana y los valores éticos y morales que deben fundamentar nuestra vida de cristianos, por esta razón es tan importante fortalecer la unión y la permanencia de la familia en el tiempo, para asegurar que estos valores y esta unidad, se sigan trasmitiendo de generación en generación, para lograr este objetivo es necesario evangelizar a el joven, y hacerle entender el valor de la vida y la responsabilidad que tienen frente a la familia y los hijos.
“los niños son don y signo de la presencia de Dios en nuestro mundo[6]” por esta razón la llegada de un nuevo niño a este mundo no puede ser un accidente, de ahí la responsabilidad que tienen los jóvenes de asumir la familia como un proyecto de vida, y la sexualidad como signo de un amor responsable y sincero entre dos personas que quieren compartir su vida y conformar una familia. Desafortunadamente estamos viviendo una época donde los poderes legislativos han perdido la conciencia moral y cristiana, y empiezan a formular leyes que van en contra de la vida humana, desde la concepción, aprobando el aborto y la libre distribución de medicamentos abortivos, esto desencadena en una cultura de muerte, donde el desenfreno sexual es el común denominador, y la solución a lo que se les convierte en un problema se puede encontrar a la vuelta de la esquina, como si esto fuera poco ahora se les ocurre la idea de permitir que parejas del mismo sexo puedan adoptar niños, esto va aun mas en contra del designio de Dios ( hombre y mujer los creo, Gn. 5, 2) y los cristianos católicos no debemos silenciarnos ante esta situación y debemos salir en defensa de los niños que tienen derecho a crecer en un ambiente de familia, con la imagen de un padre y una madre reales, que le permitan desarrollar su afectividad de una manera normal integrados efectivamente en la sociedad y en una familia cristianamente constituida, por esto, es deber de nosotros como discípulos misioneros evangelizar a los jóvenes y, a la luz del evangelio de Cristo empezar a generar una nueva conciencia e impulsar la cultura del respeto por la vida , la dignidad y respeto por la humanidad de los niños.
Desafortunadamente en muchos sectores de nuestra sociedad especialmente los más marginados, los niños y la juventud están siendo víctimas de los más grandes abusos, son sometidos a la prostitución, el trabajo forzado, la mendicidad y, la drogadicción, nosotros como cristianos llamados a la misión estamos obligados a mirar la infancia y la adolescencia, como una de nuestras prioridades, ya que en los niños y en los jóvenes esta el futuro de la iglesia y del mundo.
“Dejad que los niños si acerquen a mi”( Lc. 16 ) nuestro señor Jesucristo nos ha dejado los niños como ejemplo de humildad, y camino a seguir para llegar al reino, por esto es nuestro deber trabajar por su evangelización, y luchar por la defensa de sus derechos y la defensa de su dignidad; “la niñez, al ser la primera etapa de la vida del ya nacido, constituye una ocasión maravillosa para la transmisión de la fe”[7] por esto nosotros estamos llamados a aprovechar este potencial para fortalecer nuestra iglesia católica, es tarea nuestra fortalecer la pastoral familiar, infantil y juvenil, si logramos integrar estos tres grupos pastorales podremos recoger muy buenos frutos, en cuanto al fortalecimiento de la familia, porque la familia, es el centro de la sociedad y de la vida cristiana.
OMAR ANDRES OSPINA HERNANDEZ
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